Escribe: Federico Gazzoli

El conocido dicho de que “el fútbol siempre da revancha” quedó expuesto ayer en el “Pozo”, del barrio Almirante Brown, ya que Unión Central ya aseguró el pasaje a los cuartos de final del campeonato, objetivo al cual, en el Apertura, acarició pero no concretó.
Para conseguir dicha premisa, Unión Central debió transpirar bastante y revertir un marcador adverso en el último cuarto de hora ante River que, más allá de su ubicación en la tabla, le complicó bastante el partido al otra vez líder de la Zona A.
Finalmente, el elenco de Carlos Bonaveri terminó obteniendo una importante victoria por 2-1 ante el juvenil elenco de Víctor Bengoa sumando tres puntos que, ante la caída de Yrigoyen en otro sector de la ciudad, le permitió concretar la clasificación a instancias finales (al igual que Universidad Nacional).
El inicio del partido, como así gran parte del mismo, se disputó en la mitad de la cancha donde la pierna fuerte y las imprecisiones a la hora de jugar fueron moneda corriente. Fue por esto que a ambos conjuntos se les hizo difícil llevar riesgo sobre el arco contrario.
Cuando la visita comenzó a complicar con pelotas paradas, River se replegó algunos metros para defender correctamente cada tiro libre y fue así que esperando ordenadamente encontró la apertura del marcador.
Cuando iban 16 minutos, la defensa “millonaria” despejó rápidamente el peligro de su área y Emanuel Izaguirre encabezó un contragolpe con gran corrida por el sector izquierdo desde la mitad de cancha y quedó cara a cara ante Juan Barrera y definió de derecha decretando el 1 a 0.
Esa no fue la única mala noticia para Unión en el arranque del partido; es que, a los 20’, se fue expulsado inexplicablemente con roja directa Pablo Maldonado, quien tras disputar la pelota con Mayco Arce cometió una leve falta que ni siquiera merecía tarjeta amarilla, pero el árbitro Claudio Moyano le mostró la roja.
Igualmente, a veces los jugadores tienen reacciones inexplicables y vaya si las tuvo tres minutos después Mayco Arce quien, con su equipo en ventaja numérica y en el marcador, fue informado por el asistente Mario Ibarra debido a que provocó a la parcialidad de Unión y, entonces, el árbitro le mostró la roja y él también debió irse a las duchas antes de tiempo.
Así culminó una etapa inicial en la que los de calle Rucci nunca supieron reponerse futbolísticamente para revertir la historia y sin mostrar nada de todo lo bueno que efectuó en partidos anteriores.
En la etapa complementaria se generó algo más que en el primer tiempo, pero todo a cuentagotas y sin demasiado peligro como para que el encuentro se torne más emocionante; al contrario, lo poco que se produjo se diluyó ante el mínimo aporte técnico.
En la primera media del ST, sólo se pudo rescatar una situación por bando. A los 3’ Matías Garofani tapó en dos tiempos un cabezazo de Ulises Bonaveri y, a los 28’, Barrera rechazó con los puños un tiro libre y en el rebote apareció Lázaro Carena para meter un zurdazo que salió por encima del travesaño.
Ante dicho panorama y cuando parecía que Unión comenzaba a desesperarse, Carlos Bonaveri mandó a la cancha una carta muy importante, la cual le hizo ganar el partido: el ingreso de Daniel Pérez.
Es que “Perico” (ex River) le aportó más profundidad a cada ataque “aurinegro” porque siempre se animó a pedir la pelota y a asistir a los delanteros.
A los 32’ Pérez envió un centro desde la derecha para que, por el otro sector, aparezca totalmente en soledad otro ex “millonario”, Martín García, quien definió de primera y estampó el 1 a 1.
No obstante, la celebración de dicho tanto se hizo esperar algunos segundos ya que el balón traspasó la red por un hueco y eso generó que Claudio Moyano demoro en convalidar el tanto (y además dudó, ya que miró al línea, quien se quedó parado).
Para buenas noticias de Unión, el gol fue convalidado, se dio el empate y luego aumentó su felicidad cuando, a los 38’, otro ingresado, Guillermo Arce, brindó un aporte clave ya que le ganó la posición a Lautaro Marín y, cara a cara con Garofani, definió de derecha para certificar la remontada, anotar el 2 a 1, la victoria para Unión y la felicidad de la clasificación.

La figura

Daniel Pérez, con su ingreso cambió el partido ya que se animó a hacer todo lo que no hicieron sus compañeros previamente. Pidió la pelota siempre y, cada vez que pudo, asistió correctamente a los delanteros.

El árbitro

Muy flojo arbitraje de Claudio Moyano, quien dejó dudas casi siempre a la hora de pitar. Aplicó mal la ley de ventaja, obvió e inventó infracciones y se equivocó a la hora de amonestar. Falló en la expulsión de Maldonado y sólo estuvo acertado en la roja para Arce.