Hay dos momentos de la charla con Mercedes Dagna (integrante de la Sección Diseño y Armado, ex presidenta de la Cooperativa) en la que la trabajadora narra episodios que la marcaron y que la conmocionaron. El relato de ellos, hoy, le nubla los ojos de la emoción.
Uno ocurrió luego del incendio que sufrió la sede, en calle Hipólito Yrigoyen, en el año 2005. “La gente siempre estuvo al lado nuestro y eso reconforta, exige y emociona. No puedo olvidarme el momento en que me enteré que se acercó un vecino a nuestra Cooperativa con la decisión de publicar un clasificado, con el único fin de ayudarnos. ‘Quiero ayudar a los chicos del diario’, dijo.”
“Mechi” baja la mirada y se le nublan los ojos al recordarlo.
El otro episodio que dice haberla marcado es posterior a la muerte del padre Hugo Salvato.
Fue en 2006. La sociedad se conmovía por la desaparición del recordado sacerdote y Daniel Sánchez consternaba desde sus chistes.
“Estaba escuchando la radio y oí cuando una mujer contó que el chiste del diario la había hecho llorar. Fue muy fuerte e ilustraba lo que sentía la comunidad por el sacerdote”, señaló Mercedes.
s Toda una vida

“Mechi” ingresó en 1988. Empezó como tipeadora y recuerda que Susana Schiavi (hoy correctora en otro medio de la ciudad) le realizó la prueba.
“Me había enterado que se necesitaba una tipeadora y así llegué. Tenía 28 años. En ese momento no me daba cuenta de lo que significaba trabajar acá”, narró.
Dagna cuenta, entonces, el método y los medios de trabajo en esa época y cómo difieren del presente, en todos los sentidos.
“Nunca me imaginé que aquel diario se podía convertir con el tiempo en lo que se fue transformando”, apuntó. “Eramos cinco tipeadoras y se hacía una edición de 16 páginas”, precisó.
Lo que más valora ella de EL DIARIO es “que puede escribir toda la gente. Y eso es apreciado por la sociedad”.
“Cuando se conformó la Cooperativa salí a la calle para conseguir suscriptores y me impactó mucho cuando una señora me dijo: ‘No quiero que se cierre el diario, es lo que tengo para entretenerme, informarme’”, recordó.
“La gente se anima a venir acá para contar lo bueno y lo malo, para agradecer o quejarse”, subrayó.
“No tengo dudas de que la gente sabe que aquí encontrará las puertas abiertas”, advirtió.
“Mechi” integra la sección con Raúl Olcelli, Lara Monsalve, Alexis Loudet, Noemí Bramardo y Carlos “Charlie” Armonti. También está Marcelo D’Ercoli desde hace unos meses.
EL DIARIO fue testigo y compañero de gran parte de su vida. Cuando ingresó tenía tres varones de 6 y 4 años, y de 6 meses (hoy también tiene una hija).
Juan Pablo Morre, uno de sus hijos, tenía entonces 4 años y desde los 17 trabaja acá, junto a su madre, aunque en la Sección de Redacción, cubriendo noticias deportivas.
“No me imaginé que iba a ser mi fuente de trabajo ni que iba a crecer tanto, al punto de que también sería la fuente de empleo de mi hijo. Y creció gracias a la democracia”, concluyó.