Luego del éxito logrado en la “1ª Jornada de capacitación sobre Soja Prensada y Extrusada en Origen” realizada en diciembre de 2010 en INTA EEA Manfredi, en la que participaron más de 400 asistentes (productores, asesores y grupos asociativos de productores integrados en la industrialización de la soja), el Proyecto PRECOP III del INTA desarrollará la 2ª Jornada de capacitación en Agregado de Valor en Origen. La propuesta de capacitación tendrá lugar en INTA EEA Marcos Juárez el próximo 7 de diciembre.
El tema central de la jornada será la industrialización de la soja, pero también se tratarán temas relacionados a otras alternativas que se pueden encarar frente a las oportunidades que brindan el maíz, el sorgo o el trigo, mediante el agregado de valor en origen con la máxima calidad posible.
El programa incluye temas relacionados a la importancia de la calidad de la materia prima y las herramientas de medición disponibles. Por otro lado se tratará la problemática de la gran oferta de expeller, analizando las diferentes alternativas de su uso; alimento balanceado, su proceso, escala y el mercado, también serán temas a desarrollar. Además, también se analizarán los diferentes caminos que puedan seguir el aceite de soja, el aceite refinado y el biocombustible, la tecnología disponible, proceso y escala.
La eficiencia y alta productividad del sistema productivo argentino de soja es fruto de la aplicación de buena tecnología en genética, maquinaria agrícola, manejo por ambientes de la nutrición de cultivos, control de malezas, plagas y enfermedades, eficiencia de cosecha y poscosecha, entre otras cosas. Esta buena utilización del paquete tecnológico en la producción de soja por parte del productor argentino, junto a la extensa área agrícola que posee nuestro país, lo han posicionado como el tercer mayor productor de soja del mundo, detrás de Estados Unidos y Brasil.
La Argentina exporta un 22% de soja como grano y el resto se procesa para transformarse en aceite y harina en las grandes plantas de extracción de aceite por solvente. Esto es un muy buen primer paso de agregado de valor a los granos de soja que generó puestos de trabajo en forma directa e indirecta y ha posicionado a la Argentina como el tercer mayor productor de harina de soja del mundo, detrás de China y EE.UU., con una producción de 26,1 millones de toneladas de harina de soja (2010).