A las 20.16, la temperatura era de 30 grados con una sensación térmica de casi 34 grados. Fue en el momento en que se suspendió el suministro de energía eléctrica y el viento y la lluvia se adueñaron de las calles de la ciudad dejando visibles huellas en diversos sectores de la ciudad.
Fue un día agobiante. Desde la mañaña del martes, el pronóstico daba cuenta de ráfagas de viento superiores a los 40 kilómetros y presagiaba el temporal que se desataría en el ocaso.
En menos de 25 minutos, cayeron 40 milímetros. El viento, a una velocidad que para algunos superó los 65 kilómetros por hora, empezó su tarea desvastadora.
Arboles caídos, postes tirados, cables sueltos, ramas, teléfonos sin señales, vidrieras rotas, confusión. Una ciudad, prácticamente, a oscuras esperando que el temporal silenciara su furia y le cediera paso al alivio.
Pasados los momentos más crudos de la tormenta, se movilizaron los integrantes de Defensa Civil.
La tarea de Bomberos fue ardua y sin pausa. “No pasó nada grave”, indicaron fuentes de la institución.
El intendente Eduardo Accastello y la mayoría de sus funcionarios salieron a recorrer las calles observando las consecuencias del fenómeno meteorológico.
Pasada las 22.20, y todavía a oscuras en la sede de EL DIARIO, pudimos conocer algunos detalles proporcionados por el Gobierno municipal.

@ Daños y un herido

Las autoridades proporcionaron los siguientes datos:
• Voladuras de al menos veinte techos en los siguientes barrios: Güemes, Nicolás Avellaneda, Parque Norte, San Martín, General Roca, Carlos Pellegrini, Ameghino, Las Playas y Los Olmos, entre otros.
• En el sector céntrico, numerosas vidrieras se rompieron por la fuerza del fenómeno.
• Los árboles caídos fueron la dolorosa postal en diversos sectores de la ciudad, fundamentalmente en la zona de la costanera.
• Calles anegadas. La cantidad de milímetros caídos en pocos minutos dejó intransitables a numerosas arterias.
• Corte de energía. Los postes y cables caídos en las calles obligaron a un fuerte trabajo de las autoridades y guardia de EPEC que salieron raudamente a solucionar los innumerables inconvenientes que derivaron en el corte.
De acuerdo a un informe brindado por el intendente Eduardo Accastello, dos familias se autoevacuaron en los barrios Parque Norte y General Roca y un trabajador de la guardia en la zona del basural resultó herido pero no de gravedad.

@ Momento difícil

“Es una circunstancia difícil, le pedimos a la gente que no se mueva de su casa, hay muchos cables caídos.”
A esa hora, cerca de la medianoche, el comité de Emergencia estaba reunido evaluando los daños y las distintas acciones a llevar a cabo para dar solución a todos los problemas acarreados por el fuerte temporal de la víspera.
“Vamos a trabajar toda la noche, estamos coordinando todo”, señaló Accastello.

@ Antena rota

Por otra parte, el temporal quebró la antena de Radio Centro y los responsables de la emisora informaron que realizarán su transimisión en la frecuencia 101.7.
La torre partida cayó sobre el techo del entrepiso de Bar Argentino, rompiendo las chapas de dicho sector lo que generó una ida y venida del personal del lugar que se vio con los trapos de piso renegando para sacar el agua de la intensa lluvia.
A la vez, arrastró las riendas de la antena de Radio Uno, que por esa razón sólo está en transmisión vía on line.

@ Hospital

Dificultosa situación soportó el Hospital Pasteur por la rotura de su generador, en pleno corte de luz.
La solidaridad de la gente de EPEC y de Bomberos les permitió solucionar el inconveniente por algo más de una hora.
El personal del centro asistencial también destacó la solidaridad de las clínicas de Villa María para atender diversas situaciones de emergencia.
En tanto, la autopista estuvo cortada en Ballesteros y James Craik. La tormenta, a la mañana, se cobró una víctima en General Deheza (ver página 55).