A partir del 10 de diciembre, Alejandro Balanza pasará a ser un concejal mandato cumplido, al igual que ocho de sus pares.
¿Tiene proyectado seguir en la política, dónde desplegará sus actividades, qué le dejó su paso por la Casona de Pereira y Domínguez? Preguntas que tiramos en la tarde de lunes entre pacientes y recetas.
“Voy a seguir con la medicina, atendiendo el consultorio y como auditor de la Cooperativa Médica”, fue la primera frase del médico integrante del bloque de la Democracia Cristiana.
Balanza llegó al Concejo en 2007 con la lista que proponía a la Intendencia a Raúl Costa. Antes de esa fecha tuvo un paso por el Ejecutivo como director de la Asistencia Pública.
“En la política siempre estuve interesado en el tema de salud. Mi participación fue para avanzar en la política sanitaria.”
Conoció los dos lados de la función y rescata las experiencias.
“Las dos experiencias (ejecutiva y legislativa) fueron buenas por la posibilidad de hacer cosas, por la posibilidad de entender un poco más cómo se mueve la política.”
Con el tono pausado que lo caracteriza aclara que “le gusta más la parte ejecutiva”.
¿Qué le cambiaría al Concejo, qué no le gusta?, fue otra de las preguntas de la periodista.
“Hay una cosa que no me gusta y es que no haya una representación proporcional. La famosa ley de gobernabilidad que le da la mitad más uno al que gana, tiene sus defectos.”
La falta de debate es el punto que resalta Balanza para una crítica que “está puramente dirigida al sistema y no a la Intendencia”, según asegura.
“Se obvia el verdadero debate. No existe la necesidad de convencer al otro o de que el otro te convenza. Con esta modalidad no se ejerce una genuina democracia representativa”, señala, y de inmediato remarca que de acuerdo a su pensamiento “la política es negociar” y el sistema no permite ese ejercicio “donde las ideas van y vienen”.
¿Le quedó algún proyecto pendiente?
Una pausa, una sonrisa y luego la respuesta: “Justamente esta forma de gobernar hace que los proyectos de la oposición no lleguen al recinto”.
“Presenté un proyecto de seguridad pero nunca llegó al debate. Después de las primeras épocas (en la banca) te das cuenta que la tarea es aportar, corregir u oponerte a los proyectos del oficialismo. Eso deja algunas frustraciones.”
En este momento de la nota, Balanza aclaró que “son críticas al sistema y no a la Intendencia”.
¿Le gustaría volver a una banca?
“Me gustaría una actividad ejecutiva pero intelectualmente fue interesante la experiencia, las cosas que compartí, las que aprendí”, señala al final de la charla, dejando la puerta abierta a una futura participación en las cosas del Estado.