Todas la mañanas al recorrer los kilómetros de un camino de ripio para llegar al campo donde trabajo en Silvio Péllico, ya que circunstancialmente estoy viviendo en Villa María, pensaba: ¿llegará el día que tengamos la ruta? Sobre todo los días de lluvia, porque se hace difícil transitar esos "pocos" kilómetros.
Al viajar en horas tempranas me cruzo todas las mañanas con los camiones cisternas de las industrias lácteas, con los maestros y profesores que a las 8 horas tienen que estar en sus respectivas escuelas, con médicos, bioquímica, y por qué no, con la ambulancia que en sentido contrario y por una emergencia iba rumbo a Villa María, con los vecinos que por una u otra causa tienen que viajar aún con esas condiciones climáticas.
El sueño de la ruta comenzó a transformarse en una utopía para mí. Tantas veces prometida y nunca concretada.
Pero una mañana hace pocos días, al hacer el mismo camino, un poco más tarde que de costumbre... ¿qué veo?: máquinas viales trabajando en la orilla de la banquina. Y como es de buen vecino el ser agradecido, quiero hacerlo por medio de este diario. Gracias intendente Heraldo Romano porque sé que en estos años de gestión como intendente de "mi pueblo" marcaste una huella en tiempos de lluvia, pidiendo a las autoridades que corresponden la ruta para Silvio Péllico y un día te dijeron "Silvio Péllico va a tener ruta".

Marcos Daniel Conrero
DNI 27440552