Se llevó a cabo ayer el plenario de delegados del Sindicato de Empleados Públicos de la provincia (SEP). En una reunión muy discutida los trabajadores del sector decidieron acatar la conciliación.
“Acatamos, pero con ciertas condiciones”, dijo Griselda Cavallo, delegada del SEP Villa María.
Una de esas condiciones es que el Estado provincial retrotraiga la situación al primero de octubre, cumpliendo lo pactado para esa fecha. “Esto quiere decir que la conciliación no representa 15 días hábiles sin conflicto para que el Gobierno gane tiempo, sino para que reabra la mesa de discusión salarial y para que cumpla con los acuerdos que establecen el pase de los monotributistas, los trabajadores del Plan Nacer y los auxiliares del Paicor a ser contratados”, dijo.
“También le pedimos que paguen las horas extras adeudadas, tal como estaba comprometido”, agregó.
El otro punto de exigencia al que condicionan la conciliación es que se deje sin efecto todas las sanciones dispuestas por los días de medidas de fuerza llevados adelante. “Es decir, que le devuelvan inmediatamente lo descontado a cada trabajador”, agregó Cavallo.
Si a la decisión del SEP se le agrega que la Unión de Trabajadores de la Salud (UTS) y otras agrupaciones no sindicales de trabajadores de la salud también acataron la conciliación para abrir el diálogo, se puede esperar que la situación en los hospitales públicos se empiece a normalizar desde hoy, después de nueve semanas de conflicto, con atención al 50%.