arío Quinodoz, el conocido infectólogo villamariense, vaticinó que en poco tiempo la hepatitis C se tratará por vía oral, con un alto porcentaje de curación en unos pocos meses de tratamiento.
El especialista local realizó recientemente una visita de una semana a la clínica canadiense L’Actuel, un centro de referencia internacional en materia de hepatitis y enfermedades de transmisión sexual.
Quinodoz concurrió junto a otros médicos argentinos con el fin de actualizar su información en cuanto a los nuevos tratamientos de hepatitis crónica.
Según explicó a EL DIARIO, "el tratamiento de la hepatitis C desde el año 2000 ha evolucionado velozmente en materia de medicación. En particular, se han aprobado recientemente dos nuevos medicamentos, denominados boceprevir y telaprevir, que actúan como antivirales directos, a diferencia del interferón".
Con las nuevas moléculas, que son muy útiles a los fines de combatir el genotipo I de la hepatitis C, el más resistente, se abre una nueva etapa en el tratamiento de la enfermedad.
Hasta el momento, el interferón podía curar el 50% de las hepatitis C, mientras que con los nuevos específicos el porcentaje de curación trepa hasta el 85%.
La medicación que se lanzó el año pasado es sólo una de las primeras en cubrir el exigente circuito de aprobación científica y se espera que una veintena más de remedios lleguen al mercado en los próximos años.
Para su desarrollo intervienen numerosos centros médicos y especialistas. Cabe mencionar que el infectólogo Quinodoz participa en otros estudios a escala mundial.
Boceprevir y telaprevir estarán en la Argentina en no más de seis meses. Según aclaró Quinodoz, "a diferencia del HIV, el virus de la hepatitis C no se integra al núcleo de la célula, por lo que se puede detener su reproducción de una manera más eficaz".
Cabe recordar que el virus de la hepatitis C se identificó en 1989 y diez años después logró ser bien conocido, con lo que se comenzó a desarrollar una batería de medicamentos que ahora salen a la luz.
L’Actuel está situada en la ciudad francófona de Montreal, provincia de Quebec.
Cabe mencionar que según la estadística relevada entre sus 230 pacientes, Quinodoz ha establecido que el genotipo I, el más frecuente en nuestro país, no lo es en su consultorio donde prevalece con un 84% el genotipo II, que es más fácil de tratar.

170 millones de personas

En mayo, el Comité Asesor de Medicamentos Antivirales de la Agencia de la Alimentación y el Medicamento de EE.UU. (ADAC y FDA, en sus siglas en inglés, respectivamente) ha decidido por unanimidad recomendar la aprobación de boceprevir y telaprevir para el tratamiento de personas monoinfectadas por el virus de la hepatitis C (VHC), de genotipo 1 (el más difícil de tratar) en combinación con la terapia estándar (interferón pegilado y ribavirina).
La investigación y el desarrollo (I+D) de nuevos medicamentos contra el VHC se encuentra en plena efervescencia. El nuevo arsenal terapéutico que está en camino supondrá, con toda probabilidad, un cambio de rumbo de la epidemia de hepatitis C, incrementando las posibilidades de curación para una enfermedad que afecta, a escala mundial, a 170 millones de personas.
Muchos de los novedosos medicamentos orales de acción directa contra el VHC (llamados así porque inhiben la replicación del virus actuando de forma directa contra dianas virales específicas) deberán emplearse, al menos en los próximos años, en combinación con la terapia actual: interferón pegilado y ribavirina, lo que permitirá aumentar la tasa de curación y reducir, en muchos casos, la duración del tratamiento. Asimismo, también se están investigando combinaciones de fármacos orales experimentales que prescinden del empleo del tratamiento estándar actual.

Fotografías: 1) Darío Quinodoz
2) El telaprevir llegará en pocos meses a la Argentina