Un trabajador de 59 años perdió la vida al caer de un techo de alrededor de siete metros de altura cuando se encontraba realizando tareas de reparación.
Se trata de Juan Ramón Arroyo y el accidente laboral, que tuvo desenlace fatal, ocurrió alrededor de las 17.30 del lunes, en la calle José Ingenieros al 150 de esta ciudad, donde funciona el Museo de Ramos Generales.
El malogrado trabajador fue recogido por una ambulancia de una empresa privada y trasladado en una primera instancia al Hospital Regional Pasteur, donde ingresó en estado gravísimo.
Como Arroyo tenía cobertura de una ART, fue derivado posteriormente a una clínica privada del centro de la ciudad, donde, aproximadamente a las 21 de la misma jornada, dejó de existir.
De acuerdo con datos revelados por una fuente allegada a la investigación del hecho, Arroyo, quien desde hacía más de 20 años era empleado rural de un conocido empresario del medio, se encontraba arreglando una canaleta cuando pisó en falso y se desplomó hasta el suelo, sufriendo, como consecuencia de la caída, heridas de tal gravedad que hicieron irreversible su cuadro.
No trascendió si el hombre contaba con las medidas de seguridad pertinentes mientras realizaba su tarea.
Consultada la Policía acerca del trágico episodio, desde la Oficina de Prensa de la Departamental San Martín manifestaron desconocer el hecho.
Los restos de Arroyo, quien residía en la calle General Paz 1241 de Villa María, fueron velados en la sala “B” de la empresa Paviotti de Catamarca y Parajón Ortiz e inhumados ayer a las 16.30, en el cementerio La Piedad.