La pequeña y elogiable remontada futbolística que exhibió Alumni en Santiago del Estero tuvo previamente un punto de referencia en algunos jugadores que subieron considerablemente su nivel. Y este es el caso de Maximiliano Rosales, el primer refuerzo que llegó al club esta temporada y uno de los jugadores que más partidos de Argentino A tiene en el lomo.
El central reconoce que está “bien”, pero advierte que Alumni “no está para regalar nada”, como apostando a lo que viene para sepultar lo que pasó y mirar para adelante.
Así lo reflejó en diálogo con EL DIARIO, en la previa del choque de esta noche (ver página 49), cuando dijo que el grupo piensa “en el objetivo de hacer lo mejor posible”.
“Estamos metidos en un partido difícil, pero no imposible; sabiendo que podemos hacer bien las cosas y dejar los tres puntos en casa”, afirmó el ex Juventud de San Luis.
Precisamente, si hubo un partido en el que Alumni dejó escapar algo sobre el final fue contra Juventud Antoniana, rival que le ganó en Salta durante el tiempo de descuento.
“Sabemos que en ese momento era un inicio del campeonato y había que ajustar cosas, en este momento estamos un poco mejor”, dijo Rosales al respecto. Y agregó: “Vamos a enfrentar a un equipo que no le podemos regalar nada y que tiene jugadores importantes, como también nosotros los tenemos”.
“Vamos a tratar de estar concentrados los 95 minutos que dure el partido porque allá se nos escapó un punto importante; acá queremos los tres y no se nos puede escapar”, añadió.
¿En qué crees que mejoraron con respecto al partido que perdieron con Racing?
“Hemos mejorado bastante ya desde el partido con Gimnasia y Tiro. Allá perdimos, pero se vio un cambio rotundo. Desde ahí cambió bastante el equipo. Lamentablemente, acá perdimos con Racing, pero ya íbamos en alza. En Santiago hicimos un buen partido y ojalá que se pueda demostrarlo.”
¿La idea es terminar el año sin ese peso del último puesto?
“Días atrás dije que teníamos cuatro finales hasta el año que viene; ya sacamos una, en Santiago, ahora nos quedan otras tres y, de las dos que debemos jugar de local, no tenemos que dejar escapar ni medio punto. Será difícil, duro, pero confiamos en nosotros, sabiendo que hay que jugarlo con el cuchillo entre los dientes porque no podemos regalar nada.”
Fuiste uno de los jugadores más regulares en estos últimos partidos ¿Estás en un momento esperado?
“Trabajo en el día a día, pensando en el partido que viene. Uno trata de hacer lo mejor posible, algo que le sirva al equipo. Si uno tuvo la regularidad en los partidos es también por mérito de los compañeros, de todos los que estamos adentro porque nadie se salva solo; esto es grupal. Estoy bien, tranquilo, trato de hacer lo más simple posible, no complicarme y defender mi arco, que es lo primero que tengo que hacer, pensando que no me gane el rival y no nos conviertan. Gracias a Dios me están saliendo las cosas; estoy bien en Alumni. Este es un club lindo y una ciudad bárbara para quedarse. Mi familia está muy tranquila y, si sigo haciendo las cosas bien, voy a tener para rato. Ojalá que sigamos así.”
¿El jugador de Alumni sintió el cambio o la movida que hubo en el plano dirigencial?
“Sabemos que hubo un cambio en la comisión y nos vinieron a apoyar en todo momento. Si bien faltan ajustar algunos detalles, se trata de poner todo al día, de hacer lo mejor posible para sumar. Ahora se está normalizando todo para no pensar en otra cosa que no sea jugar y poner la cabeza en el partido. Ellos hacen su esfuerzo como nosotros lo hacemos en el día a día y en la cancha. Se ha visto un cambio lindo y ojalá que sea para bien porque, si estamos todos unidos, tirando para un solo lado, esto será distinto.”