La Secretaría de Trabajo de Córdoba declaró ayer “ilegal” la huelga de 48 horas que cumplían desde el jueves los trabajadores enrolados en el Sindicato de Empleados Públicos (SEP) en demanda de una recomposición salarial.
La decisión de la cartera laboral fue adoptada pocas horas antes de concluir la segunda jornada de paro que realizaban los estatales, cuyos dirigentes abandonaron la negociación que mantenían con el Gobierno en plena conciliación obligatoria.
Al fundamentar la ilegalidad de la protesta, Trabajo señaló que “se evaluaron las causas que motivaron el quiebre de la conciliación obligatoria y se labraron las actas respectivas” sobre la base de la normativa en vigencia.
En ese sentido, decidió también elevar “las actuaciones al Ministerio de Trabajo de la Nación” para que se adopten las determinaciones correspondientes, que podrían incluir la suspensión de la personería gremial de la organización.
La medida oficial incluyó una notificación a la Secretaría General de la Gobernación y al Ministerio de Salud para que comuniquen la decisión al personal que participa en la huelga “sin encuadrarse en sindicatos con personería gremial reconocida”.
Se aludió así de forma concreta a los médicos, enfermeras y personal administrativo de los hospitales públicos que, casi en su totalidad, están afiliados a organizaciones como Médicos Unidos (MU), Unión de Trabajadores de la Salud (UTS) y Enfermeras Unidas (EU), que carecen de la pertinente personería gremial.
Las tres agrupaciones rechazaron el jueves de forma unánime el reajuste salarial de 400 pesos remunerativos que se ofreció sólo al sector profesional. El secretario General de Gobierno, Ricardo Sosa, ofreció esa cifra sólo para unos 3.900 profesionales de la salud, lo que fue rechazado por los propios médicos y auxiliares.
La UTS, MU y la organización que agrupa a las enfermeras adelantaron ayer que desde la próxima semana realizarán otras medidas de fuerza, que podrían derivar en “una huelga por tiempo indeterminado”.

@ Movilización

La difusión de la medida fue paralela a una movilización que realizaron ayer los estatales, quienes enarbolaron pancartas y expresaron cánticos alusivos en la zona céntrica, provocando un descomunal caos vehicular.
La movilización partió desde la sede del SEP y concluyó frente al shopping Patio Olmos, donde el titular del SEP, José Pihen, aseguró que la de ayer fue la última protesta contra el Gobierno de Juan Schiaretti y adelantó que desde el día 10 negociará con José Manuel de la Sota, quien asumirá como gobernador.