Versiones encontradas acerca de una supuesta explosión en un laboratorio de la Escuela Superior Integral de Lechería (ESIL) llegaron a comienzos de esta semana a la Redacción de EL DIARIO. Desde ese momento se realizaron averiguaciones y finalmente ayer se consiguió la palabra oficial, a través de una charla entre un periodista y el director del establecimiento, el ingeniero Alberto Carballo.
Con el objetivo clarificar un tema que ronda en corrillos de la ciudad, se transcribe la conversación:

-¿Hubo una explosión o no?
-Hubo un cortocircuito en una estufa, como se quema cualquier artefacto. Estábamos en un práctico, no pasó nada; ningún alumno sufrió consecuencias. Normalmente alguno se asusta. Tenemos un seguro, los hicimos atender y tenemos la seguridad de que nadie ha tenido consecuencias. Dentro de todo lo que es el sistema de funcionamiento contamos con las medidas de seguridad...
-¿Se revisó a los alumnos y están bien?
-Se revisó a los chicos por el tema de los oídos. Nadie salió lastimado ni hubo quemaduras; absolutamente nada.
-¿Ocurrió el martes de la semana pasada?
-Esto fue el miércoles, cuando usábamos un equipo para hacer disecación y tuvo un problema mecánico, un cortocircuito.
-¿Por qué no se informó antes?
-Porque fue un accidente de menor importancia.
-Una de las fuentes consultadas habló de una supuesta discusión entre docentes previa al accidente...
-No, nosotros hemos hablado con los docentes y la gente del laboratorio y a todos los tomó por sorpresa. Estaban en un trabajo de práctico normal.
-¿Se sancionó a algún docente por este hecho?
-Hemos pedidos informes a nivel de docentes y de laboratorios para saber cuáles fueron las instancias, porque uno no estaba en el momento. Esto es trabajo común de todos los días y es normal que pueda haber ocurrido algún desperfecto en algún equipo.

Los alumnos que estaban en el laboratorio en el momento del accidente cursan segundo año de Nivel Medio, aunque el lugar es de uso común también para el Nivel Superior. Hay clases de la carrera de Ingeniería Agronómica que se dicta allí.
“Es muy amplio y por eso tenemos un sinnúmero de medidas de seguridad. Eventualmente, puede ocurrir una cosa como ésta, porque los equipos se rompen, tienen su problemática, amén de que uno tiene su sistema de mantenimiento... Le garantizo que ninguna persona salió lastimada. Y algunos somatizan más y otros menos”, reiteró el director Carballo.