El miércoles por la noche, la profesora y directora teatral María Cristina Soave cumplió uno más de sus postergados anhelos.
Presentó en sociedad su primer libro, titulado “Vos y yo, por la vida”, sobre el escenario de su sala La Llave
En el marco de los festejos por sus 50 años con el arte, Soave dio a luz un material bibliográfico que reúne una sensible reflexión sobre su propia vida como madre y la entrañable relación que ha estrechado con su hija Daniela.
La acompañaron en la mesa sus amigas María Laura Cecchini, la licenciada Ana Frossasco (prologuista del libro), el editor Darío Falconi (que publicara el libro a través de El Mensú Ediciones) y María Elisa Scarone. Como coordinadora de la velada se encontraba la destacada periodista Rebeca Bortoletto, que fuera alumna de Cristina, décadas atrás.
El cierre estuvo a cargo del reconocido vocalista local Lucas Arregui, quien regaló versiones de “De vez en cuando la vida” de Serrat y “A mi manera” de Paul Anka, entre otras.

Pedagogía de la confianza

Frossasco, en su prólogo a propósito del libro, dejó expresadas las siguientes consideraciones: “Quien conozca a las protagonistas de las experiencias que aquí se cuentan pueden pensar, anticipadamente, que éstas están cubiertas de dolor, angustia, hasta fastidio y desasosiego. Nada más lejos. Seguro que es difícil compartir los días con un hijo discapacitado (lo digamos sin rodeos), pero hay que tener la sabiduría de esta madre para captar todo lo que sus médicos le aconsejaron, llevarlo a la práctica y transformar lo que podría ser martirio en alegría. Estas son narraciones de dos seres que se aman y hacen de cada obstáculo un desafío, que convierten el llanto de un tropiezo en una risa y, aún más, en una carcajada.
María Cristina Soave proclama a cada paso el entusiasmo del vivir, la felicidad de estar acompañada, el regocijo de saltar la valla tan dura que el destino le puso en frente. Cada cosa es el resultado del júbilo de mantenerse juntas, las dos, y con los otros, hasta con los que no están, como papá Chiche, que se ha ido, pero ha dejado vivencias que siempre están presentes. Este libro, aunque posee una temática definida, es un texto al que cualquier persona que busca ideas motivadoras, propuestas creativas… puede acudir. Su estilo no es poético, pero su mensaje está cargado de poesía; su lenguaje no es llano, pero su lectura es accesible y placentera; resulta, así, una conjunción armónica de palabra y contenido, lo que facilita el acercamiento del mismo al lector. Finalmente se advierte en estas páginas, como una constante, la presencia de la pedagogía de la confianza que María Cristina mamara ya desde su hogar y que hoy ella ofrece generosamente, convencida de que así todo será más fácil, que siempre será posible dar un paso más”.