El 0 a 0 que se registró el viernes por la noche, en Plaza Ocampo, tranquilamente pudo ingresar en los archivos de los partidos “olvidables”, así sea para Alumni como para Juventud Antoniana.
Sin embargo, el punto alcanzado parece que “se mira y no se toca”, ya que más allá que algunos lo consideren insuficiente, en el elenco villamariense resaltaron que “lo importante era sumar”.
El experimentado mediocampista Sergio Zanabria, por ejemplo, admitió que el equipo “no jugó bien”, pero dijo que se fueron “conformes”.
“El partido fue duro y nos queda bronca por algunas situaciones que no pudimos convertir, pero el fútbol es así; a veces jugás mal y lo ganás, lo importante es sumar”, afirmó.
En cuanto al juego, Zanabria recalcó: “La cancha chica no ayuda a jugar, no quedan muchos espacios, entonces los rivales nos vienen a esperar siempre, se encierran atrás, buscan el empate... Así hay que ser muy precisos y a veces nos equivocamos”.
Más allá de todo, aseguró: “Hay que estar tranquilos porque me parece que vamos a meter un triunfo en Rosario”. Y para argumentar el presagio, sostuvo: “Tenemos la espina clavada porque Tiro nos pintó la cara en nuestra cancha y ahora queremos hacer lo mismo y conseguir los tres puntos”.
Por otra parte, el central Maximiliano Rosales también dijo que “se buscó por todos lados, pero el rival se había parado muy bien atrás”. “Lamentablemente no pudimos entrar, el partido fue malo y el árbitro también dirigió mal”, apuntó luego.
En cuanto al empate final, Rosales manifestó: “Queríamos la victoria, pero nos llevamos un punto que sirve por la situación en la que estamos”.
El central volvió a recibir elogios por la actuación de la defensa y, al respecto, puntualizó: “Uno trata de dar todo en el aspecto defensivo y que, después, los encargados de jugar, hagan lo mejor posible y puedan convertir adelante; esta vez no se dio completo, pero vamos a seguir mejorando”.
En tanto, el mediocampista Federico Silvestre recalcó: “Siempre es bueno sumar, pero como se dio el partido, creo que hicimos más para quedarnos con los tres puntos”.
Juventud Antoniana “es un equipo que presiona bastante, por eso el partido se hizo trabado, luchado”, explicó el ex Instituto.
Un tiro que el arquero Gustavo Pérez le sacó en la boca del arco fue una de las situaciones que más lamentó Silvestre.
“Lo que me sacó el arquero fue una cosa de locos”, expresó el mediocampista, sin vueltas. Y recordó que “en Santiago del Estero pasó lo mismo”, en este caso, en un mano a mano ante José Burtovoy.
De todas maneras, aseveró que “está al caer el gol y esperemos que llegue en la próxima fecha”.
Por último, Silvestre destacó que “la idea del cuerpo técnico es salir a jugar los partidos de igual a igual”.
“Hay que seguir por este camino, tratando de hacer todo lo posible para salir del fondo”, añadió.
En cuanto al cuerpo técnico, precisamente, el entrenador Miguel Angel López se fue sin hablar, aunque sí dio declaraciones su ayudante de campo, Claudio D’ambrossio.
“Lo que hizo el rival no me importa, me preocupo por lo de Alumni y creo que no perder dos partidos seguidos, en un equipo que venía de derrota en derrota, es positivo; hubo cosas para rescatar”, afirmó el mayor de los D’ambrossio, quien hoy volverá a intensificar los trabajos de cara al partido que Aumni jugará el miércoles, en Rosario.