Escribe: Federico Gazzoli

En un encuentro vibrante, de resultado y dueño cambiante y al que la lluvia le otorgó cierto dramatismo, en Arroyo Cabral el local Colón obtuvo el pasaje a semifinales del torneo Clausura de la Liga Villamariense al igualar 2 a 2 ante Deportivo Argentino y venciéndole en el global por 4 a 3.
A pesar de tener la ventaja a su favor, producto de haber vencido por un tanto de diferencia en el encuentro de ida, desde el inicio el “Rojinegro” salió decidido a buscar el partido ya que permanentemente intentó atacar sobre el arco contrario.
La primera situación clara la generó al cumplirse el primer cuarto de hora cuando Daniel Abate Daga desde el fondo rechazó de derecha a izquierda donde apareció Waldemar Carranza se escapó en velocidad e ingresando al área metió un zurdazo que tapó Roberto Bazzani y luego Carlos Jacobi envió al córner.
No tardó mucho más en llegar la primera alegría de la tarde ya que un minuto más tarde Matías Pacifici dentro de su propia área desvió con la mano un tiro de esquina de Lucas Giménez por lo que Mauro Daniele no dudó en decretar penal en favor de Colón.
Diego Rivera, canjeó la pena máxima por gol definiendo a ras del piso y a la derecha de un arquero que voló hacia el otro costado y el 1 a 0 le daba dos tantos de ventaja en el global a los dirigidos por Amadeo Perossi.
Ese fue el peor de los arranques para un “Lobo” que, necesitado de igualar las acciones, se encontró rápidamente en desventaja y protagonizó un primer tiempo de flojo nivel al punto tal que sólo llegó hacia el arco local a los 33´ cuando Daniel Vaglio se perdió increíblemente el empate debajo de arco tras varios rebotes dentro del área.
Con este panorama planteado, el optimismo rondaba por Arroyo Cabral pero a poco del final del primer tiempo sucedió algo inesperado que haría virar considerablemente el timón en la etapa complementaria. Es que, a los 40’, Luis Demichelis saltó a cabecear con Gabriel Danna y el rubio delantero le golpeó -sin intención- el rostro al rival, aunque el árbitro no lo vio así y expulsó con roja directa al ex Alem.
Vaya que cambió el panorama en el segundo tiempo ya que al primer minuto Argentino consiguió desnivelar y facturó el empate. Vaglio llegó hasta el fondo por el sector izquierdo y metió un centro que Abate Daga desvió con sus manos y que le permitió a Daniele cobrar el segundo penal de la tarde. Allí Gabriel Gonella puso el 1 a 1 definiendo a la derecha de un Germán Brignone que voló hasta el otro palo.
Esa fue la mejor inyección anímica para el elenco de Christian Romero que, alcanzando la igualdad parcial y jugando con superioridad numérica, se adueñó de la pelota y del partido para tratar de buscar un segundo tanto que por lo menos forzará a definir todo desde los doce pasos.
Luego de tanto buscarlo lo consiguió a los 26´ cuando Carlos Jacobi bajó el balón tras un córner y Rivera se llevó la pelota por delante para meterla en su propia puerta y darle el 2 a 1 a la visita.
Mientras tanto, Colón parecía estar dormido en este segundo tiempo pero abajo en el marcador el orgullo salió a flor de piel y los de Perossi, ayudados por las expulsiones de Negro y Andrada (a los 33´ y 36´ respectivamente) para el rival, fueron a buscar de contragolpe ese tanto que les diera la clasificación sin tener que sufrir en la definición por penales.
El eufórico festejo se dio a los 40´ cuando Jacobi y González se chocaron, quedando los dos en el piso, y dejándole el balón servido en bandeja a Rivera quien, sacando un conejo de la galera, le pegó bombeado desde aproximadamente 30 metros ante un Bazzani totalmente adelantado y señaló el 2 a 2 final.
De ahí hasta el cierre de cotejo, Colón se tranquilizó bastante, tuvo la pelota y la clasificación en sus manos y sólo aguardó el final para festejar el pasaje a semifinales, donde enfrentará a Hipólito Yrigoyen y continuar así en búsqueda del ansiado título que hace algunas temporadas se le viene negando.

La figura

Diego Rivera, gran despliegue físico de “Catoca”, quien corrió y metió en cada pelota como si fuera la última y por si eso no fuera suficiente, en el peor momento de Colón no le tembló el pulso para meter tremendo golazo que confirmó la clasificación de su equipo.

El árbitro

Regular arbitraje de Mauro Daniele, quien alternó buenas y malas. Bien en los penales aunque no amonestó a quienes metieron la mano en dichas infracciones.