Muchas veces el deporte nos depara sorpresas, similitudes y coincidencias en las trayectorias de los deportistas o los dirigentes, en los hechos deportivos o en los resultados.
En el devenir de los acontecimientos, de los hechos o resultados, suelen encontrarse curiosidades o parangones en la vida deportiva y/o dirigencial de los protagonistas del deporte, en cualquier actividad y ámbito.
El parangón que se genera entre el mencionado dirigente y el recordado Guillermo Armando Evans es realmente curioso, si se enumeran una serie de sucesos que los tiene, en distinto tiempo, a uno y otro como protagonistas.

Destacado atleta y dirigente

Guillermo Armando Evans nació en Villa María, el 27 de abril de 1923. En 1940 comenzó a jugar al basquetbol, representando a la ciudad en distintos torneos a lo largo de toda la provincia. Fue también jugador de fútbol de la primera división del Club Sarmiento de esta ciudad.
En el año 1944, se inició en la práctica del atletismo, compitiendo en varios torneos y representando a la provincia de Córdoba en campeonatos nacionales.
Evans fue dueño del récord provincial de 800 metros en 1948 (1m 54s 2/10, obtenido en Génova, Italia, en una gira realizada tras los Juegos Olímpicos de ese año.
En 1948 el Comité Olímpico Argentino lo designa como integrante del equipo que representaría a nuestro país en los Juegos Olímpicos realizados en Londres (Inglaterra). Fue el primer deportista local en participar en dicha competencia.
En 1972 es el fundador de la Asociación Villamariense de Atletismo (que remplaza a la Federación Villamariense de Atletismo) y ocupa el cargo de presidente desde ese año hasta 1981 (año de su fallecimiento). En 1975 fue nombrado vicepresidente de la FAC.
Al mismo tiempo fue gestor del actual polideportivo local (que se fundó en 1983, y que lleva su nombre).
En el año de su fallecimiento, 1981, se desempeñó como delegado de la FAC ante la Confederación Argentina de Atletismo.
Evans falleció mientras se disputaba un Torneo Nacional de Atletismo en Resistencia, Chaco, el 8 de noviembre de 1981, a la edad de 58 años.
Daniel Marcelino Sotto, nacido el 19 de noviembre de 1963 en Pasco, se radicó a fines en 1981 en Villa María, fue en sus tiempos de atleta un reconocido medio fondista. En 1985, más precisamente el 18 de agosto, con una marca de 1m 53s 7/10.
Luego se convirtió en dirigente (fue sucesor en la presidencia de la Asociación Villamariense de Guillermo Roldán, tras la muerte del recordado atleta y dirigente en 1996), es también gestor del proyecto (junto a Ariel Valdemarín, entre otros) del futuro polideportivo que se construye en el Campus de la Universidad Nacional de Villa María. Fue el tercer presidente de la AVA, luego de Evans y de Roldán. Ese cargo lo desempeñó hasta 2007, donde es elegido presidente de la FAC y desde hace un par de años es vicepresidente 2do de la CADA.
Ha sido junto a Ariel Valdemarín, uno de los gestores para que la ciudad cuente con un polideportivo con pista sintética, hecho que está próximo a concretarse en el Campus de la Universidad Nacional de Villa María.

Las coincidencias

“Se dan algunas coincidencias o curiosidades, que pueden generar un paralelo entre Evans y yo, aunque él fue como atleta a los Juegos Olímpicos de Londres en 1948, y yo lo haré como dirigente”, relata el dirigente.
“A Evans lo conocí a principios de los ‘80, hablé con él. Yo quería que fuera mi entrenador. En ese momento me dijo que no estaba entrenando atletas de fondo, cosa que en su momento me dolió mucho. Finalmente me vengo de Pasco a vivir a Villa María a fines del ‘81, y me empieza a entrenar el “Vasco” Hubelli. A fines de aquel año fallece Evans. Compartimos varios viajes pero teníamos poco diálogo con él. En ese momento él trabajaba con velocistas como Belkis Fava, Graciela Alicioni o Jorgelina Rodríguez”.
Consultado por las coincidencias: récord provincial de 800 metros, presidente de AVA, gestor de un polideportivo y ahora los Juegos Olímpicos y casualmente en Londres, dijo: “Voy a los Juegos, en el mismo lugar, varios años después, pero con distintas funciones, él lo hizo como atleta, integrando una de las delegaciones más numerosas de nuestro país que se recuerde. En ese momento gobernaba el país Juan Domingo Perón y se apoyaba mucho al deporte. Ahora pasa lo mismo, la aparición del ENARD ha posibilitado que todos los deportistas puedan conseguir los fondos y tener la preparación adecuada. Te entregan todo el equipamiento que se necesita y eso ha permitido mejorar marcas y resultados. Si esto sigue como ahora, seguramente se verán muy buenos resultados en poco tiempo”.
La otra coincidencia es la gestación de una pista y Sotto recordó que “en 1998, tras una promesa del ex Secretario de Deportes de la Nación, Hugo Porta, comenzamos a trabajar para instalar una pista de atletismo. Fue sólo un anuncio fallido, pero siguió siempre latente esa posibilidad. Ahora, gracias a Dios, está muy cerca de concretarse, sólo le falta la parte final. Hay que hacer la base asfáltica para ponerle posteriormente el sintético y concretar el equipamiento.
Finalmente, sobre la posibilidad de estar en los Juegos, señaló: “Estar en Londres es asumir una responsabilidad muy importante, porque voy en la función de dirigente, cambia en mucho a ir como atleta, donde hay que obtener resultados. En la de dirigente, uno debe tratar de que los atletas tengan todas las cosas a su disposición, se tiene la responsabilidad de atender el grupo, mantenerlo unido, que también es importante para obtener resultados”, dijo Sotto, y agregó: “La diferencia está marcada en que Evans lo hizo como atleta, y yo estaré como dirigente. Para mí es un gran orgullo, venir del interior, como era Evans, y estar en un evento olímpico, más allá de que no esté dentro de la pista, sino como dirigente”.
“Estoy recorriendo un mismo trazado que se da por casualidad. Yo sentí una sensación especial cuando se me anunció que habían pensado en mí, como jefe del equipo de la delegación de atletismo. Esta es una de las designaciones más importantes recibidas por un dirigente del atletismo de nuestra provincia. Yo pienso que con esto, estoy hecho, es lo más importante que le puede pasar a un dirigente deportivo, y jamás me lo imaginé”, concluyó.