Ayer por la tarde la profesora Cristina Gallo se consagró como la primera magíster en dirección coral de Argentina.
La docente de la UNVM y directora de los cuerpos vocales Nonino y Coral Mediterránea defendió su tesis de maestría sobre Interpretación de la Música Latinoamericana del Siglo XX, en el auditorio de Extensión universitaria.
Para ello se valió de las 16 voces del Coral Mediterránea (integrado por docentes y estudiantes de Villa María y Córdoba) y de vídeos alusivos. La ceremonia, que empezó a desarrollarse a las 12 con una interpretación en vivo y se extendió hasta horas de la tarde, contó con ciertas particularidades. No se trataba de una maestría dictada en nuestra UNVM sino en la Universidad Nacional de Cuyo, donde Gallo debió asistir desde 2005 a 2007, en clases presenciales e intensivas (de una semana o dos cada tres meses, con compañeros de México y Chile).
Por ello, ayer arribaron a nuestra ciudad la vicedecana de la Facultad de Artes y Diseño de la mencionada institución mendocina, junto a la directora de la maestría, el director de tesis Diego Bosquet y el cónsul de Brasil en Córdoba.

La obra de Pinto Fonseca

La presencia del diplomático alude al extenso trabajo desarrollado por la profesora para su trabajo final: se trataba de los "Elementos umbanda y candomblé en la obra para coro mixto a capella" compuesta por el compositor brasileño Carlos Alberto Pinto Fonseca".
Al autor, considerado uno de los grandes creadores y directores de música coral de nuestro continente, Gallo lo llegó a conocer personalmente en la década del noventa cuando el prestigioso músico dictara un taller en Mar del Plata.
Tres años después de su fallecimiento ocurrido en 2006, Gallo viajaría a Bello Horizonte para encontrarse con las obras todavía desordenadas de Pinto Fonseca que conservaba la viuda. En resumen, la docente seleccionó doce canciones de las partituras recolectadas, para estudiarlas en su tesis y que fueran recreadas ayer. "Por primera vez fueron tocadas todas juntas, ya que pertenecen a épocas diferentes; la más antigua es del ‘63 y la más nueva, de 2001", comentó Gallo.
La intención del estudio era comprobar la hipótesis de que Pinto Fonseca adoptó la temática y algunos elementos de la tradición afrobrasileña para crear una música de vanguardia y compleja. "No era una música étnica ni religiosa, a pesar de que haya traspolado las letras de los cánticos y haya convertido el ritual de trance del umbanda con recursos musicales para colorear sus sonidos", puntualizó.

“La música coral es considerada menor”

Con esa base, sumado a un análisis pormenorizado de conceptos y detalles técnicos, Gallo aportó para su presentación una puesta escénica que incluyó una escenografía, una iluminación y un vestuario especial, además de palabras alusivas y percusión corporal.
El trabajo realizado por la docente se convirtió en la quinta tesis desarrollada sobre la obra de Pinto Fonseca en América Latina. Consultada sobre la poca difusión de su obra, Gallo sentencia: "Sucede que la historia oficial de la música margina a la música coral o la trata como obra menor. Pero este autor es uno de los más grandes y supo hacer dialogar a una práctica religiosa con un nivel compositivo que se estudia en la academia".