En una emotiva despedida, Diego Gobbato le dijo “adiós al fútbol” luego de 23 años de jugar en primera división. Precisamente, el goleador de Juventud River Plate de Ausonia eligió un 16 de diciembre, día en que cumplió sus 39 años, para cerrar una etapa de su vida.
Debutó a los 16 años y su currículum demuestra que recorrió distintas ligas, porque mas allá de vestir las camisetas de su querido Juventud, también lo hizo con la casaca de Alem de Villa Nueva, Central Argentino como así también pasó por el futbol de la Liga Bellvillense, por la Béccar Varela, jugó en Rosario y hasta cruzó la cordillera para llevar sus goles a Chile.
Alrededor de 50 amigos, actuales y ex compañeros y dirigentes del fútbol lo acompañaron en la noche del viernes, en la que se disputó un partido y luego una cena.
En cuanto al cotejo, participaron ex jugadores como Hernán Lorenzatti, “Mono” Zabala y Marcelo Sachetto, entre otros; también lo hicieron jugadores que compartieron distintos clubes como Cristian Agosto, Pablo Fernández, Pablo Suárez, jugadores que culminaron el año con él en su querido club y algunos integrantes de la reserva que se coronó campeona días atrás defendiendo los colores de la “Juve”. Y, por supuesto, dijo presente Rubén Calcagno, quien fuera entrenador de muchos años de Gobbato.
El cotejo terminó igualado 5 a 5 y el homenajeado marcó uno de los tantos, mientras que el del empate final lo marcó su sobrinito, quien festejó como un goleador de raza, corriendo hacía un costado y con las manos arriba para culminar con el abrazo emocionado de su tío.
Tras la cena, Gobbato tomó el micrófono y agradeció por lo que la vida y el fútbol le dieron, destacó su amor por el equipo de su pueblo y el sentimiento especial que le quedó tras vestir los colores de Alem y de Central Argentino.
También, con algunos jóvenes presentes, insistió en la responsabilidad y el compromiso que se necesitan dentro y fuera de la cancha y se emocionó hasta las lágrimas al recordar a quienes lo acompañaron desde siempre, sus padres, su mujer (y ahora su pequeño hijo), los dirigentes presentes y también al ya desaparecido Marcelo Alamo, con quien lograra el Provincial en Alem de Villa Nueva, entre otras personas.
Luego, los representantes de Juventud River Plate de Ausonia le entregaron una plaqueta de reconocimiento, al igual que Luis Ortega y Martínez, dirigentes del Tricolor villanovense, mientras que los de Central Argentino le entregaron una casaca del “Expreso Rojo”.
Fueron 23 años intensos, de alegrías, sufrimientos, goles, amigos, discusiones y festejos que tuvieron su cierre en la jornada del viernes entre amigos, compañeros y uno de sus grandes amores: la pelota.