El secretario de Gobierno de la Municipalidad de Arroyo Algodón Cristian Ghiano manifestó ayer a EL DIARIO que “el dueño de Bugarú dio de baja el local el lunes por la mañana. Pagó lo que adeudaba al municipio y cerró, según el mismo dijo, ‘para no volver a abrir nunca más’”, señaló el funcionario.
“Con esto queremos llevar, dentro del profundo dolor en que estamos sumidos todos, un poco de tranquilidad a la población”, abundó Ghiano en referencia a la manifestación popular que tuvo lugar tras el violento y trágico episodio que le costó la vida a Lautaro Piva.
Por otro lado, el secretario de Gobierno de Arroyo Algodón explicó que “Bugarú estaba totalmente en regla con todo lo que se le exigía e incluso tenía más seguridad que la reglamentaria. Se exigía un policía cada 150 concurrentes al boliche. Esa noche había 130 personas y tres policías”, puntualizó.

Sospechoso trasladado

El adolescente de 17 años que permanecía detenido como uno de los implicados en la riña fatal fue trasladado ayer por orden de la Justicia hacia la capital provincial.
Es que tras haber tomado declaraciones “en caliente” a los sospechosos, el fiscal de Instrucción Gustavo Atienza, quien está a cargo de la causa, encontró que habría elementos suficientes como para sindicar a este chico como el presunto autor del golpe letal que terminó con la vida de Piva. Por tal motivo, se determinó que el adolescente fuera trasladado a Córdoba para ser sometido a distintas pericias psiquiátricas y psicológicas tendientes a fundar más aun las sospechas de la Fiscalía o descartarlas. Habrá que esperar hasta que estén los resultados de dichos estudios para conocer la suerte de este chico que, por tener 17 años, aunque es menor de edad, es imputable ya que tiene más de 16.
Además, trascendió que el chico habría cumplido 18 años el lunes.
Los otros implicados, de 15 años, fueron restituidos a sus padres, menos uno de ellos quien junto a los mayores de edad sigue detenido en la Comisaría de Distrito, confirmaron desde esa repartición policial.
Cabe consignar que los acusados nombraron como representante legal a la asesora letrada de los Tribunales de Villa María, donde se tramita la causa.
Lautaro Piva murió tras ser atacado el domingo a la madrugada por una patota en el boliche de Arroyo Algodón.