En el último suplemento Rural de 2011, EL DIARIO consultó a Javier Baudino (vicepresidente de Apymel), para que realice un balance de la industria láctea en este período, en el que destacó la importancia de abrir nuevos procesos de comercialización.
“El año que termina nos dejó una enseñanza, y es que las Pymes deben cambiar su enfoque comercial”, dijo. Opinó que los montos cuantitativos en volumen de leche “llegaron para quedarse y aún mejorar y, por ello, para mantener los tambos en nuestras empresas debemos ser más dinámicos en el comercio, asociar eficacia con tecnología y adecuar las plantas para llegar a un porcentaje en la comercialización con el exterior”.
En el mismo análisis, Baudino consideró “que el año se caracterizó por una salida de invierno y primavera con importantes niveles, volúmenes récord de leche fluida y mucha del sector Pyme, pero que no tuvo cabida comercial y ello arrastró las cotizaciones en salida de fábrica hacia la baja, inferior a la registrada el año anterior”. “Como esos volúmenes se manifestaron mucho antes de la primavera, pocos pudieron fijar stock para aguantar la disminución de precios; ello motivado por la baja capacidad instalada para sostener el stock y esto sumado a la falta de fondos generó la caída de precios.” “Ello no se reflejó en la misma medida con los precios al productor, dejando a muchas Pymes con déficit muy importantes.”
En lo referente a los últimos meses, acotó “que desde comienzo de este mes se percibe una disminución en los volúmenes de recibo de leche, aspecto que establece un mejor posicionamiento comercial relativo a las empresas, ya que muchas empezaron a retirar las bonificaciones procurando recuperar el precio de venta logrado con referencia a mayo pasado”.
Predijo en este aspecto una tarea dificultosa: “la gran resistencia que ponen los representantes de cada empresa, ante la presión que reciben de los comerciales, hacen dudar entre volver a tener una empresa con balance positivo o resignar alguna venta, lo que evitaría llegar con los stock lo más disminuido posible hacia fin de año”. “Muchas empresas, ante erogaciones significativas como son aguinaldo y gastos corrientes que aumentaron mucho, tienen escasas posibilidades de recupero rápido.” Como signo favorable, el dirigente del sector lácteo acotó “que se nota mayor interés de las grandes empresas por completar sus recibos con el suministro de otras empresas, ello constituirá una especie de alivio para que el sector en general mejore; si las Pymes logran colocar algo de leche fluida se termina el problema de incrementos de stock ante la decisión relativa a la suba de precios”.
Con referencia a los meses del verano, Baudino indicó “que se espera que las Pymes puedan alcanzar la suficiencia de pago de las grandes empresas, que quedó muy diferenciada en la etapa actual”.
“Indudablemente, con la Liquidación Unica se obtendrá una realidad más acorde a lo que estas empresas reciben; generalmente los volúmenes de tambos y exigencias de calidad son inferiores y eso compete también a la diferenciación en el pago, no obstante ello el sector necesita mejorar los ingresos para continuar en carrera”, definió.
En términos sintéticos y con sentido desiderativo, Baudino concluyó afirmando: “Que estas son todas tareas que nos quedan para comenzar este 2012, año que se presenta con estimaciones de producción muy altas y no podemos mirar para otro lado; somos la parte intermedia de la cadena que recauda para la producción y si no estamos realmente certeros con las decisiones podemos llegar a tener dificultades”.