La conducción del Club de Abuelos responde

Por la presente la Comisión Directiva actual del Club de Abuelos José Manuel Estrada, a través de su presidente, Ramón Ferreyra, responde a la nota publicada el 31 de diciembre pasado.
En primer lugar, negamos que el señor Miguel Quinteros haya sido expulsado por denunciar hecho alguno y nos remitimos a la fecha de las misivas enviadas en aquella oportunidad y que demuestran fehacientemente la falsedad de los dichos de este señor.
Que si bien se decidió oportunamente separarlo del cargo que ocupaba, con anuencia de los miembros de la Asamblea Ordinaria, fue entre otras cosas por haber dispuesto de fondos sin la autorización del presidente y sin asesoramiento alguno.
Con respecto a la resolución de la Dirección de Personas Jurídicas (DPJ), fuimos notificados y como la misma se basaba en dichos unilaterales y arbitrarios, sin prueba alguna, de ciertas personas, que pretenden presumiblemente causar daño a nuestra institución y/o sacar rédito económico, es que hicimos uso de nuestro derecho de defensa y presentamos un recurso de reconsideración, el que fue atendido por la DPJ y dejó sin efecto esa injusta resolución.
Básicamente lo que se denunciaba era que el club que presido no cumplía con el objeto social que es la realización de actividades sociales, culturales, deportivas, etcétera.
Si bien no es razonable estar presentando todos los años ante la DPJ las actividades que realiza el Club de Abuelos, ante esta impertinente denuncia hemos presentado todas las actividades realizadas y que se están por realizar a fin de demostrar el cumplimiento del objeto social.
Fíjense que incoherencia. Primero, expresan que lo único que realiza el club son bailes y, luego, pretenden una comisión normalizadora o un veedor para que controlen los bailes y el bufé.
Presumimos que toda esta movida tiene un trasfondo político de personajes que no pueden llegar a conducir una institución de la ciudad y pretenden aparecer en escena con estas falsas expresiones y denuncias, o bien desconocemos con qué otro fin podrían hacerlo.
Por otro lado, no fue sorpresiva la suspensión de la resolución por parte de la DPJ, como manifiesta Quinteros, en virtud de que en nuestro recurso de reconsideración se demostró la falta de fundamento y lo ilógico de la denuncia presentada en esa repartición, lo cual motivó, a quien había tomado la decisión, a revertirla.
Aprovechamos la oportunidad para saludar en este comienzo de año a todos los socios y amigos del Club de Abuelos José Manuel Estrada.
Ramón Ferreyra
DNI 6598219