Todo estaba tranquilo en los primeros días de enero para el legislador provincial Darío Ranco.
Después de un intenso año político con numerosas campañas electorales el dirigente decidió tomarse unos días de descanso con su esposa, la intendente de Tío Pujio Nancy Schiavi y sus hijos.
El destino elegido para las vacaciones fue la costa atlántica. Precisamente, la localidad de Mar de Ajó.
Allí, en ese lugar recibió la convocatoria a sesiones extraordinarias para el próximo martes y planificó su retorno para sentarse en la banca de la Legislatura de Córdoba y tratar, entre otros temas, la deuda que la Nación tiene con la provincia y la ley de fuego.
Pero un imprevisto cambió sus planes y le quitó la tranquilidad.
El pasado viernes, de pronto, perdió la visión de su ojo derecho.
Momentos de tensión vivió toda la familia, esperando los estudios que le realizaron en la ciudad de la costa.
El diagnóstico fue contundente: “Desprendimiento de retina”. “Hay que operar urgente”, dijeron los facultativos.
Así, la familia Ranco emprendió con angustia el regreso a casa.
Anoche, Ranco se encontraba en su hogar preparando el viaje a Mendoza, ciudad donde será intervenido quirúrgicamente.
Consultado por la periodista de EL DIARIO, el legislador indicó que la operación se realizará en el Instituto Saldívar.
Ranco será acompañado a Mendoza por su esposa, Nancy Schiavi, y se espera que el martes le practiquen los estudios de rutina y el miércoles entre al quirófano para recuperarse de la patología que le impide una visión normal.