El sindicalista, que durante años representó a los municipales, Camilo Rodríguez, dio su visión sobre la no renovación de contratos a empleados municipales fundamentada en la reestructuración que está haciendo el Gobierno local.
El texto, acercado por Rodríguez a nuestra Redacción señala lo siguiente:
“Enterándome de que en el municipio de Villa María a varias decenas de empleados no se les ha renovado sus contratos de trabajo quisiera escribir unas palabras.
No sólo lo hago desde mi experiencia como gremialista sino también porque en algún momento cuando la crisis arreciaba, en pleno 2001, estando en la Intendencia Eduardo Accastello y tocándome estar frente al sindicato que representaba a los municipales pudimos dialogar y encontrar un punto lógico de encuentro que hizo que nadie se quedara sin trabajo.
Nosotros supimos delegar por un año un porcentaje de la antigüedad y, reitero, pasamos la crisis sin que nadie se quedara sin trabajo.
Estando la misma persona en la Intendencia ¿cómo puede ser que no se encuentre una solución a la crisis actual y así no dejar a nadie en la calle?
Entiendo que por estos días Accastello está de vacaciones y sus funcionarios hablan de ‘reestructuración’, cuando la realidad es que dejan gente sin trabajo en un año que no pinta de lo mejor.
Pero como si eso pareciera poco los funcionarios consideran que no deben darle explicaciones a los ciudadanos, les han comunicado que no tienen que volver al trabajo a gente que estaba de vacaciones y cuando los consultan los medios de prensa dicen no querer hablar. ¿A qué están jugando? ¿Acaso los ciudadanos no necesitamos informarnos detalladamente de todo esto?
¿Qué es una reestructuración? ¿Dejar gente en la calle en medio de una crisis y ajuste? ¿O cómo se llama este contexto de aumento de más del ciento por ciento de las tasas municipales, personal cesantes, aumentos de tarifas, etcétera, etcétera y etcétera?
Pasa que el hilo vuelve a cortarse por lo más débil, aumento desmedido de las tasas a los vecinos y echar trabajadores a la calle.
Algunos de los trabajadores cesanteados hace más de diez años que trabajan para el municipio. Podrán decir que lo han hecho bajo la modalidad de contratos por tareas eventuales, a lo que les puedo responder que ésa fue la cobertura para mentir la relación laboral, pues nada tenía de eventual lo que hacían en sus puestos.

Procedimiento repetido por años

Pero este procedimiento de mentir la relación laboral se ha repetido durante años, de ello han sido cómplices autoridades de los distintos poderes (al que le quepa el sayo que se lo ponga). También han hecho algo parecido con los llamados ‘facturantes’ que figuran como prestadores de servicio y son trabajadores como cualquiera.
Alguien podría preguntar pero cómo ha sido posible todo esto, cómo los trabajadores han debido dejar que les mientan sobre su relación laboral.
Y pasa que siempre existen vendedores de serpientes que te la enroscan con discursos ideologizados y lo nacional y lo popular y otro etcétera. Pero también el miedo explica la situación. Alguien les ha hecho vivir como real a los trabajadores el hecho de que si no hacen caso, si no agachan la cabeza y aceptan esas condiciones pierden su trabajo. Y allí podemos ver la explicación de por qué se han ocupado, con distintas estrategias, de atacar o erosionar algunas organizaciones gremiales.
Lo colectivo no les conviene. Si los trabajadores se juntaran y se solidarizaran entre ellos podrían hacer valer sus derechos. De allí que tratan de imponer el desánimo, a unos le dicen que si hacen algo pierden el trabajo, a otros que si reclaman están en contra del proyecto tal o cual.
Yo estoy en contra de dejar gente sin trabajo y sé que los que dejan gente sin trabajo no están del mismo lado.

‘Tienen mucho para reclamar’

Por eso desde mi experiencia les digo a los cesanteados que se organicen, que peleen por sus derechos, que es mentira que no pueden reclamar nada legalmente (existen antecedentes de empleados municipales que la Justicia de Villa María ha reinstalado en sus puestos de trabajo). Tienen mucho para reclamar, el regreso a sus puestos, la diferencia de haberes por todos estos años, los aportes y cargas sociales, etcétera.
Y a los que este recorte no los ha tocado sean solidarios, no sabemos a quién le toca el próximo recorte. Los trabajadores nos defendemos entre nosotros, por eso la solidaridad es fundamental. Pero quizás mi principal mensaje es al intendente ¿cómo que no se puede encontrar una salida?
Existe gente con capacidad para dialogar en el municipio que podrá sentarse con él para que se vuelva a reeditar aquella manera de pasar la crisis que supimos organizar en 2001.”