El debate sobre plátanos sí o plátanos no sobre la calle Mendoza y otras arterias de la ciudad, no cesa.
Al respecto, Ana Becerra, actual funcionaria provincial y ex concejal del Justicialismo, envió una nota a la Redacción para recordar (ya lo habíamos anticipado en EL DIARIO) que existe una ordenanza que protege taxativamente al arbolado de la calle Mendoza.
En la misiva, informa que la ordenanza es la número 4.312 y que fue presentada por su bloque cuando era concejal junto a Eduardo Accastello por la minoría.
La norma, establece que se declara "como patrimonio natural de la ciudad de Villa María, el arbolado público ubicado sobre calle Mendoza entre avenida Hipólito Yrigoyen y Marcelo T. de Alvear".
También prohíbe toda extracción de árboles de esa arteria que no esté autorizada por autoridad competente y aclara que en los casos en los que se autorice tal extracción, el ejemplar debe ser remplazado por otro de la misma especie, provisto por la Municipalidad.
La ex concejal, en la nota dirigida a EL DIARIO, indica lo siguiente:
"He leído y escuchado en distintos medios de nuestra ciudad el debate suscitado por el tema de los árboles de la calle Mendoza, a raíz de un proyecto presentado en el Concejo Deliberante de Villa María.
He guardado un respetuoso silencio al respecto esperando que tal vez las instituciones ambientalistas y la gente de la ciudad se expresara al respecto, y los ciudadanos lo han hecho y muy bien, por lo tanto vamos a contar una historia.
La calle Mendoza, fue elegida a principios del año 1997, como la calle más emblemática para cualquier ciudadano villamariense dentro y fuera de la ciudad, distintas encuestas realizadas por colegios primarios en distintos trabajos para las materias de medio ambiente y ecología, así lo probaron en aquel momento. Es más, un reconocido caricaturista de EL DIARIO (Nino Menardo) hacía junto con la caricatura, un ping pong de preguntas donde consultaba por una calle de la ciudad, y todos invariablemente respondían la Mendoza.
Fue por aquellos días, que a un comerciante se le ocurrió inaugurar una carnicería en dicha calle (que aún existe), y no tuvo mejor idea que extraer un árbol del frente de su negocio para poder ingresar las reses con un gancho especial instalado en la pared. La reacción de la gente fue inmediata, la catarata de llamadas al Concejo, las cartas a los bloques y las protestas de los ambientalistas fue una sanción pública indudable a dicha acción.
Como concejales del bloque de Unión por Córdoba (en minoría) presentamos un proyecto firmado por Eduardo Accastello, José Escamilla, Raúl Costa y Ana Becerra, que fue aprobado como proyecto del Concejo Deliberante en su totalidad".