|
|
|
|
|
|
|
El Shantala aplica el yoga a los bebés |
|
|
|
|
|
Segunda parte:
El masaje Shantala es un arte sencillo e importante en sí, que se caracteriza principalmente por tres elementos: por las técnicas en sí, por la aplicación de ejercicios de yoga para el bebé y por el uso de la hidroterapia (al final, se baña al bebé para eliminar los restos de aceite, regular su temperatura y generar relajación).
El masaje Shantala se basa en la presión suave y los movimientos descendentes, ya que su objetivo es la relajación del bebé. Por ello, el ritmo es lento, sin prisa.
Con el masaje Shantala, usted como madre o padre le regalará caricias a su bebé.
Múltiples son los beneficios de este masaje; entre ellos, podemos destacar aquellos que hacen referencia al bebé:
- Estimula el sistema nervioso.
- Mejora el sistema respiratorio.
- Ayuda a aliviar las molestias ocasionadas por los gases, cólicos y estreñimiento.
- Mejora la digestión.
- Los bebés aprenden a relajarse y a conciliar el sueño.
- Fortalece el vínculo del apego entre la madre o el padre y el hijo.
- Hidrata y tonifica la piel.
- Fortalece el sistema muscular y psicomotor del bebé.
Para los papas :
- Es placentero.
- Ayuda a reducir las posibilidades de depresión posparto.
- Proporciona relajación.
- Enseña a conocer las necesidades de su hijo.
- Mejora el vínculo afectivo entre los padres y el bebé.
- Incrementa la confianza.
El masaje Shantala consiste en orientarse apenas por una dirección y una secuencia de movimientos según la edad que tenga. Y para que sea efectivo hay que ponerle dos ingredientes básicos: la ternura y la delicadeza.
Es conveniente hacer un masaje a diario, el masaje es indicado a todos los bebés, especialmente a los que se encuentran en la incubadora o sometidos a la ventilación mecánica. En este caso, el masaje no puede ser hecho en su totalidad. Será favorable tanto para los bebés como para sus padres pues proporciona una forma de contacto emocional, físico, y una comunicación entre ambos. La experiencia es muy gratificante para los dos. Además, el bebé suele responder positivamente y es mucho más feliz porque ha sido tocado y masajeado. Se recomienda este contacto diariamente, siempre que sea posible. Siempre después o antes del baño y en un ambiente calentito y cerrado. Puede haber una música suave de fondo para facilitar la interacción. Si es verano, puedes aplicarla al aire libre si el bebé ya es mayorcito.
@ Técnica
Sentados en el suelo con las piernas estiradas, las espaldas rectas y los hombros relajados, cubriremos nuestras piernas con una toalla o la mantita del bebé. Tomaremos el niño desnudo y lo colocaremos sobre la toalla en una posición en que ambos podamos mirarnos.
Untaremos nuestras manos con un aceite natural o crema para bebés y dedicaremos un minuto a mirarle. Luego, empezaremos el masaje.
Hacer movimientos con firmeza, siempre de dentro para fuera y del centro para las extremidades o de abajo para arriba. Del lado izquierdo al derecho, y a un ritmo lento y constante, moderando la presión de los dedos según la zona.
Empezar por el pecho. Deslizar las manos del centro para los lados. Primero el izquierdo y después el derecho.
Después del pecho, masajear sus brazos, girando al bebé de lado, sujetándolo por el hombro y haciendo movimientos (con la otra mano) del hombro hacia el pulso, manteniendo siempre un ritmo constante.Masajear las manos, estirando suavemente cada dedito. Y lo mismo con los pies y sus deditos.
Situar una de nuestras manos a la altura del estómago del bebé y deslizarla bajando en dirección al ombligo como si estuviera vaciándola. Alternar los movimientos con una y con otra mano. Si el bebé tiene problemas de gases, ese masaje le ayudara a eliminarlos.
Si el bebé no es demasiado pequeño, dar la vuelta a su cuerpo y darle un masaje en la espalda, siempre de la parte central a las laterales. El lo agradecerá con balbuceos y grititos.
Importante: el masaje debe ser evitado cuando el bebé esté con fiebre, gripe o con alguna infección. Y si todavía toma pecho, solamente se masajeará después de darle leche.
Es necesario saber respetar los deseos y la disponibilidad del bebé y también de sus padres. Habrá días que, por alguna razón, el bebé no se muestre muy disponible al masaje. Del mismo modo que el padre o la madre. En este caso, no se debe insistir. Si los padres no están relajados lo suficiente para dar el masaje al bebé, mejor que no insista en ello. El bebé lo percibirá y puede que no se relaje como debería. Así que lo mejor es sustituir este momento del masaje por otra actividad que no necesite tanta concentración, como cantar canciones infantiles o leer un cuento, etcétera.
Centro Integral de Preparación para el Parto
Patricia Rodríguez de Vodanovic
Lic. en Educación Física y en Kinesiología y
Fisioterapia- MP 5215
rodriguezpatriciac@hotmail.com
Otras notas de la seccion Tiempo de salud
Diez preguntas acerca de cirugía de aumento de mamas
"Amamantar y trabajar ¡logremos que sea posible!"
Más del 60% de los argentinos padece de reflujo gastroesofágico
Jornadas de Salud Mental
Aumentan casos de verrugas genitales causadas por el virus del papiloma
|