Escribe: Gaspar Bachanini

Después de lo que fue un interesante arranque de campeonato, Universidad Nacional sufrió dos caídas consecutivas ante los elencos riotercerenses, que justamente le arrebataron anoche la cima de la Zona 5 del Provincial.
Ayer, en condición de local, Atlético Río Tercero lo sorprendió en Plaza Ocampo y lo batió por 2-1, lo que le originó al elenco de nuestra ciudad ceder terreno en la pelea por la clasificación.
El clima y el estado del campo de juego aportaban como para disfrutar de un buen espectáculo. Sin embargo, durante la primera etapa se vio un partido chato y por momentos plagado de imprecisiones.
Con el balón circulando por el mediocampo, sin vértigo en ninguno de los equipos, los arqueros casi no tuvieron que exigirse demasiado.
Lo más rescatable fue una escapada de Stambule por el sector derecho que terminó con un remate muy desviado. Por el lado del local, una aparición de Martín Truglio, con pierna izquierda aunque bien contenida por el arquero Luccini.
Por fortuna, la segunda mitad fue disputada con otra actitud por ambos equipos, los espacios comenzaron a aparecer y de esta forma el partido empezó a tomar otro color.
A los quince minutos llegó el primer golpe y lo dio la visita. Un tiro de esquina perfectamente ejecutado por Stambule hizo conexión con la cabeza de Jorge Martínez por atrás de toda la defensa rival y el cabezazo de pique al suelo se hizo incontenible para un Ballatore que nada pudo hacer.
A partir de aquí, Atlético tomó las riendas del encuentro y se dio el gusto de manejar los tiempos durante casi todo el segundo tiempo. Tanto así que diez minutos después amplió la ventaja a través de un verdadero golazo.
Martínez envió un pase largo por arriba de la defensa que obligó una salida larga de Ballatore, sin embargo su defectuoso rechazo derivó en los pies de Stambule, quien desde cuarenta metros mandó la pelota al fondo del arco para el 2 a 0 y la tranquilidad de los dirigidos por Maltagliati.
Universidad intentó reaccionar, pero a pesar de llegar al descuento por medio de Diego Marín, nunca pudo encontrar el juego que lo caracterizó a lo largo de la última temporada.
De esta manera, el visitante consiguió un triunfo fundamental para sus aspiraciones de clasificar, mientras que la casa de altos estudios deberá replantearse algunos conceptos de cara al futuro para no perder confianza y recuperar su estilo.

La figura

Gustavo Stambule fue el encargado de brindarle la verticalidad necesaria a la ofensiva de su equipo. Siempre se mostró claro a la hora de distribuir el juego y cuando tuvo la oportunidad cerró su gran actuación con un excelente gol desde 40 metros.

El árbitro

Una actuación regular de Ricardo Olmedo. Por momentos estuve demasiado permisivo y el local le reclamó una mano en una de las últimas jugadas del partido, sin embargo la jugada no se logró distinguir claramente. Bien acompañado por Ceballos y Belén.