Sólo en el radio urbano de Villa María, los Bomberos brindan asistencia a cuatro choques diarios, lo que representa una cantidad significativa de personas que deben ser trasladadas al Pasteur para su atención médica.
En una ciudad que además, está ubicada en el cruce de dos rutas nacionales con un alto nivel de accidentología, no se explica cómo el centro de salud más importante de la región, no cuente con los elementos necesarios para la asistencia de todos los niveles para este tipo de traumas.
Ya se sabe que no cuentan con un tomógrafo, pese a que años atrás fue donado uno a la Municipalidad para ser instalado en el Hospital y el Gobierno de la provincia entregó un cheque con fondos para acondicionar una sala para esa aparatología diagnóstica. A ese problema lo resuelven con el sector privado, al que, por supuesto, hay que pagarlo.
A eso se sumaba la falta de neurocirujanos, pero después de intensas gestiones de las actuales autoridades del Hospital, consiguieron, primero uno a comienzos de año, al que se sumó un segundo la semana pasada.
Con los dos especialistas (Sebastián Cañas y Heraldo Pares) que trabajan en conjunto desde el Pasteur con otros dos que están en el Hospital de Bell Ville (Marcelo Olivero y Marcelo Gavira), garantizan las visitas diarias en sala para los internados y las guardias de 24 horas para los 365 días del año. Pero ese avance, lejos está de solucionar el problema de la atención a los traumatizados.
Es que, en caso de requerir cirugía, deben derivar a los pacientes a Bell Ville, con el riesgo que ello implica, porque en el Pasteur no cuentan con el instrumental necesario.

Gestiones

“Primero quiero señalar que antes que estuvieran los neurocirujanos, derivábamos a todos a Córdoba. Ahora, podemos contar con los especialistas que hacen una primera evaluación y, en el caso de ser necesaria la cirugía, se envían a Bell Ville, que es más cerca”, dijo la directora del Pasteur, bioquímica Liliana Abraham, destacando que ahora son menos los derivados.
Según explicó, se requiere para esas cirugías una caja con instrumental, valuada en aproximadamente 70 mil pesos, más un microscopio específico.
“Mañana -por hoy- tengo una reunión en Córdoba donde voy a pedir que lo que llegó para el Hospital nuevo, al menos lo específico para las neurocirugías, lo envíen para ser utilizado desde ahora”, dijo.
De todas maneras, quieren ser precavidos. “Queremos que sean las mismas empresas las que lo instalen, para que, en caso de cualquier problema, corran las garantías”, dijo.
Mientras tanto, los heridos graves que necesitan operación urgente, no tienen más que exponerse al riesgo de una media hora de tránsito para poder ser intervenidos.