Hugo Gónzalez está dolido. Después de trabajar por más de doce meses como portero y sereno del San Martín Rugby Club fue dejado, a partir del 1 de febrero, sin trabajo.
Sorprendido por la actitud de sus ex patrones, González recurrió al Ministerio de Trabajo para intentar recomponer su vínculo laboral con el club.
El intento fue rechazado de plano por la directiva del club que desconoció que en el pasado o en el presente existiese alguna "dependencia técnica jurídica y económica, en la categoría de maestranza" con el denunciante.
"Sólo quiero que me digan qué es lo que he hecho mal. En octubre me reuní con la nueva comisión y ahí no sólo me confirmaron en mi puesto sino que también reconocieron el sueldo que pretendía", manifestó Hugo, en diálogo con EL DIARIO.
"Yo amaba lo que hacía, lo que he vivido en el club no me lo quita nadie. Trabajé a conciencia y responsablemente, considero injusto que me echen de esta manera... sin justificativos", indicó el reporteado.
"Le quiero pedir a los socios, a la gente maravillosa que tiene el club, digan si los he tratado mal o les he faltado el respeto. Al contrario, yo los aprecio a todos y cada uno, para ellos yo daba todo y a veces más de lo que me correspondía", señaló.
"No entiendo cómo pueden decir que no había relación laboral conmigo. Que desmientan a los socios que venían al club y me veían a toda hora acá. Sinceramente no entiendo que pasó", reflexionó el entrevistado.
A pesar del rechazo a su reclamo por parte de los encargados de conducir los destinos del club, González advirtió que utilizará todos los recursos legales para que reconozcan su condición de trabajador.