“Aproximadamente la mitad de los participantes es controlado tras la salida del boliche. Eso nos hace inferir que el resto ha bebido, de lo contrario aceptarían someterse al test de alcoholemia”.
Las palabras son del secretario de Gobierno de Villa María, Héctor Muñoz. EL DIARIO lo consultó ayer sobre la marcha del Programa Conductor Responsable, que consiste en la colocación de una pulsera a la persona que acepta la condición de no tomar alcohol durante su estadía en los boliches y de manejar el vehículo en el que concurre con sus amigos a bailar. A cambio, recibe bebidas sin alcohol en la disco, durante toda la noche, y premios a la salida de la misma.
La propuesta se implementó este año en el marco de la prevención y lucha contra el alcoholismo, uno de los máximos flagelos que azota a la juventud.
Muñoz precisó que por el momento la campaña se realiza en un boliche de la costanera, “porque es una zona de gran concurrencia”.
El promedio de participantes del programa cada fin de semana es de entre 50 y 60 personas. Un 50% de los que se registran vuelven a los controles tras la salida de los boliches.
“Considerando que es voluntario y que andan en grupo, el número es importante”, consideró el funcionario.
La mayoría son varones, “porque son quienes en general salen en auto”.
Los premios son “entre dos y tres desayunos”. Muñoz dijo que los mismos son donados por empresas como la Shell de Ramonda, Café Argentino, Musicalísimo, Acovim. AERCA también se comprometió a ayudar. En tanto, el Cine Sud ha cedido, en algunas ocasiones, entradas para ver una película.
El funcionario explicó que “la entrega de un desayuno tiene sentido, porque se busca de esa manera que no beban alcohol después del boliche”.