La presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, busca prohibir la opción de entrega directa en el sistema de adopción nacional, a través de un anteproyecto de ley que ya tiene para estudiarlo y que fue elaborado a pedido de ella misma, según indicaron medios de comunicación nacionales.
Para adoptar niños hay dos mecanismos: el de la entrega directa y el del Registro de Adoptantes, donde figuran las personas interesadas en adoptar y que son evaluadas por profesionales.
La titular del Ejecutivo nacional tiene un anteproyecto de ley que reformaría el Código Civil prohibiendo la modalidad de entrega directa y que, además, sancionaría a la persona o pareja que obtenga una guarda de hecho a través de esa vía y separará al niño o niña de la familia que lo tiene.
Fernández de Kirchner creó una comisión para estudiar la reforma al Código Civil que está conformada por algunos ministros de la Corte Suprema de Justicia de la Nación y medio centenar de especialistas.
En Villa María, el Registro de eventuales adoptantes casi no ha tenido movimientos en los últimos años, en comparación con el sistema que ahora buscará anular la presidenta.
“La entrega directa es una excepción que tiene la ley. Los padres definen, en el marco de su patria potestad, a las personas que se harán cargo de sus hijos. Lo hacen motivados por la confianza en ellos, según expresan”, explicó a EL DIARIO la jueza Cecilia Fernández (ex de Menores, y actualmente a cargo del Juzgado de Juventud, Niñez, Violencia Familiar y Penal Juvenil de Villa María).
La magistrada ya no interviene en los casos de adopción por los cambios en las competencias que se dieron el año pasado. Ahora el tema está bajo la órbita de los jueces de Familia. No obstante, durante años estuvo en la temática.
Cecilia Fernández evaluó que “se corren menos riesgos” en el caso de que se realice la adopción a través del sistema registral y no mediante la entrega directa.
“Los padres que están anotados han atravesado una serie de estudios y de pasos que los llevó a estar en el listado de eventuales adoptantes. Se trabajan muchos aspectos con el equipo técnico y hay quienes luego de entrevistas deciden no adoptar. Por eso es sumamente valioso el registro”, valoró la funcionaria.
Para ella, la entrega directa es “uno de los agujeros negros que tiene la ley” y que “ya fue prohibida en otros países”.
“La familia que se encuentra en el listado ha pasado instancias que dicta la norma y se sometió a evaluaciones, y eso brinda más garantías de que el niño o la niña sea querido, respetado y cuidado. El norte debe ser la felicidad del chico o la chica”, resaltó la jueza.
La presidenta dijo en la apertura de sesiones ordinarias del Legislativo que era necesario modificar el sistema de adopciones.