Una joven no vidente de la ciudad de Hernando se graduó días atrás como profesora de Música. Luego de varios años de estudio consiguió cumplir uno de sus sueños.
En diálogo con periodistas de la emisora local RH1 Radio Integración, dijo al respecto que “fue todo un desafío, porque al principio tenía más dudas que certezas, entonces fui a conocer el Conservatorio de Río Tercero, me gustaron las materias de la carrera y encontré otra chica no vidente, que me dijo que hay un sistema para escribir las notas en Braille que se llama musicografía, entonces comencé”.
Durante todo el transcurso de la carrera "Georgi", tal como la conocen todos, recibió el apoyo incondicional de su familia, de sus compañeros, de los profesores y entre todos colaboraban para que pudiera escanear las fotocopias, que luego una persona vidente las tenía que corregir y también los profesores le dictaban las notas para que ella luego pudiera transcribirlas al Braille.
“Con la tecnología me llevo súper bien, me solucionó buena parte de la vida, puedo acceder a libros, música, a programas para ciegos, aunque sigo usando mi vieja máquina que tiene más de 20 años para transcribir las partituras”, narró Georgina.

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En cuanto a las prácticas docentes expresó que fue "muy lindo", ya que con los niños más pequeños se sintió "muy cómoda" y "muchos no creían" que en realidad no viera, con los alumnos del secundario sintió mayor temor, pero también fue una "muy buena experiencia".
Dio clases en las escuelas rurales “Narciso Laprida” y “Roque Sáenz Peña” y realizaron dos proyectos: uno fue un vídeo en donde se filmaron bailando el carnavalito que luego fue emitido en el programa que conduce Soledad, “Ecos de mi Tierra”, y otro fue sobre la construcción de instrumentos musicales. Por ellos la inspectora de zona la invitó a participar de un encuentro de docentes en Villa María, llamado “Encontrarte”.
En cuanto a la legislación para los docentes con discapacidades dijo que “no hay nada al respecto, en una asignatura nos visitaron los delegados de la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC), le pregunté sobre el tema y me dijeron que por ahora no hay nada porque es raro ver a un profesor con alguna discapacidad en las aulas, pero dijeron que habría que desarrollar leyes al respecto”.
En cuanto a los prejuicios contó que con los más pequeños y jóvenes nunca tuvo problema, pero si con los adultos que muchas veces no saben cómo tratarla. Además “uno está acostumbrada y sé que puede pasar, lo pensé desde el primer momento que decidí estudiar, pero uno tiene las herramientas y hay muchas formas de hacer las cosas, sólo tienen que darme la oportunidad”, finalizó la joven.