El bloque oficialista (Frente para la Victoria - Partido Justicialista) dio vía libre ayer a las fotomultas, al otorgarle el marco legal que necesitaban luego del hueco normativo que se generó tras la última modificación del Código de Tránsito. No lo hizo sin críticas: la bancada de ediles del Partido Villamariense, Darío Capitani y Georgina Echegaray, así como los del radicalismo, Nora Landart y Carlos Gagliano (aunque este último estuvo ausente) plantearon objeciones y no acompañaron la iniciativa.
Todo ocurrió en la sesión semanal del Concejo Deliberante, cuya Orden del Día tuvo diversos puntos, aunque por lejos ése fue el más trascendente.
Con la propuesta del oficialismo, se buscó explicitar en detalle el funcionamiento de los medios electrónicos a la hora de detectar infracciones de los ciudadanos al conducir. Es que en lo que respecta a las fotomultas, se produjo un vacío legal cuando se modificó el Código de Tránsito, a fines del año pasado, y la adhesión a la ley nacional.
Las fotomultas están habilitadas por el Código de Tránsito pero cuando se modificó y hubo una adhesión a la ley nacional este punto quedó afuera.
El presidente del bloque justicialista, Rafael Sachetto, explicó ayer en el recinto de la Casona de calle Mitre que “el proyecto intenta subsanar alguna dificultad para sancionar algunas infracciones”. De esta forma, buscan otorgarle herramientas a los jueces de Faltas para emitir sanciones por las infracciones detectadas a través de las cámaras instaladas en dos semáforos de la ciudad (se prevé la colocación de otras en más esquinas).
Sachetto, ex secretario de Gobierno del accastellismo, remarcó que las cámaras están avaladas por el INTI, por lo que “no distorsian la realidad”, estando certificada su calibración.
Por su parte, el edil del Partido Villamariense, Darío Capitani, fundamentó el voto negativo de su bancada, al argumentar que la norma se contraponía a leyes nacionales de tránsito que el Gobierno había adherido con antelación. Sostuvo que existe un fin “recaudatorio” por parte de la comuna y dijo que no estaba defendiendo al infractor sino luchando por garantías para el presunto infractor, “para que esto no se convierta en caza bobos”. “Nuestro criterio no percibe una cuestión preventiva sino recaudatoria”, acusó.
Desde el radicalismo, Landart también rechazó la avanzada oficial. “La prevención debería seguir siendo la opción”, destacó y alertó que “todos los ciudadanos deben ser advertidos de estos mecanismos de control”.

@ Cruces e ironías

Las expresiones de los referentes de la oposición motivaron idas y venidas durante un extenso lapso entre los concejales. El justicialismo les contestó a través de Sachetto y Mauro Beltrami.
El titular del bloque dijo lamentarse “por escuchar que existe una intención recaudatoria cuando vemos a diario a personas que ni siquiera frenan un poquito en las esquinas” y remarcó que “es un acto criminal cruzar el semáforo en rojo”.
La iniciativa salió por mayoría (el ex ultra opositor Ricardo Pereyra también adhirió) y significó una modificación a la Ordenanza 4.179. Se señaló que la idea apuntó a detallar de manera “más clara y precisa” los elementos que debe contener el acta de infracción y brindó la norma procedimental de las fotomultas, para un correcta aplicación de los jueces de Faltas.
Además, ahora cualquier “funcionario o agentes municipales afectados a las tareas de control” labrarán actas de infracción, cuando en el ejercicio de sus funciones compruebe una irregularidad.
Las faltas de tránsito podrán comprobarse a través de medios electrónicos, fílmicos, fotográficos o de grabación de vídeo, ya sea desde medios móviles o puestos fijos.
Las fotomultas ya se aplicaron desde octubre del año pasado hasta el 17 de enero, cuando fue publicado el nuevo Código de Tránsito y por este vacío legal los jueces se quedaron sin la herramienta para sancionar infracciones.
En febrero de 2011, se había revelado que durante cinco días de ese mes se habían cometido 350 infracciones en el cruce de calles San Luis y Mitre, en el marco de la información que arrojó la prueba piloto del funcionamiento de cámaras.
En ese corto período, 194 autos y 63 motos fueron captados pasando el semáforo en rojo.

@ A remate

En tanto, en la sesión de ayer, por unanimidad los concejales aprobaron un proyecto de ordenanza desafectando bienes del dominio público del Corralón.
Los venderán por remate público ya que por su estado son inviables para su reparación.