Escribe: Juan Pablo Morre
Un examen complicado aprobó ayer Universitario (nueva denominación) en Plaza Ocampo al obtener esos triunfos que describen la real envergadura de un equipo que, luego de una primera temporada con total éxito, arrancó este certamen con puntaje perfecto.
Tras un primer tiempo donde mostró confusión y desaciertos -producto también de la labor del rival- que se le sumó la expulsión de Ballatore y la salida de Marín (remplazado para que ingrese Mancilla), la “U” mejoró su producción en el complemento y terminó doblegando a un Atlético Ticino que, pese a su buena producción, la misma no terminó siendo fructífera ante la falta de aciertos en ofensiva.
En este último período, Rodrigo Liendo, de interesante actuación, ratificó su notable presente (anotó por cuarto partido consecutivo) al definir con acierto y a partir de allí brindarle un trabajoso como importante triunfo para su equipo.
Hasta dicho gol, el cotejo entregó un dominio repartido en un trámite muy trabajado por parte de ambos elencos y en el cual prácticamente fueron pocas las situaciones de gol, si bien se manifestó mayor claridad del local a la hora de generar peligro.
En el primer tiempo, el arranque mostró al elenco de Bernadó con herramientas más productivas para arrimarse al arco de Fantino, quien ya al minuto le impidió el gol a Liendo.
A través de buenas sociedades por el centro, el local supo abrirle grietas a un Atlético que, de a poco empezó a gestar su idea, emparejó el partido y se entonó cuando Ayrton Páez desniveló mostrando su gran habilidad.
La visita también ofreció una intensa presión que casi le brindó grandes réditos cuando Ballatore demoró en su salida y la pelota le quedó a un Bertola que volvió a meter el balón al área, donde apareció Freytes para conectar al gol. No obstante, el festejó no pudo ser ya que el línea decretó offside del delantero.
Sobre la media hora, pese a que la “U” buscaba levantar su nivel con Barbuio yendo a los costados y el retroceso de Liendo, la mejor impresión del Atlético quedó de manifiesto cuando aprovechó espacios y Páez terminó siendo derribado por Ballatore sobre la media luna del área y el árbitro lo expulsó (en lugar de “Rafa” entró Mancilla y salió Marín).
Igualmente, en lo que quedó de la etapa Ticino no logró -pese intentar con trepadas de Ismael Rodríguez y apariciones de Páez- inquietar considerablemente a su rival.
Ya en el complemento, a través de las buenas actuaciones de Liendo y Barbuio arriba, sumado al crecimiento de sus líneas y otra participación de Hernández en la faz ofensiva, la “U” controló el cotejo y puso en alerta a la visita rápidamente.
No obstante, primero sufrió porque cierto desperfecto a la hora de impactar el balón en salidas defensivas le permitió a Freytes quedar cara a cara con Mancilla, quien ganó el duelo.
Como respuesta, a los 19’, el elenco universitario abrió el marcador cuando armó juego sobre la derecha y, pese a que la jugada pareció ensuciarse, la pelota le quedó a un Hernández que gambeteó rivales y asistió a un habilitado Liendo (la defensa rival tiró tardíamente el achique) que sentenció el 1-0 con tiro al primer palo.
Con el gol, la “U” apeló a su juego criterioso y punzante (Liendo tuvo el segundo minutos después tras cesión de Barbuio) y justificó la victoria transitoria ante un Atlético que, en el último cuarto de hora y con otro oxígeno por los buenos ingresos de Negrini y Favalli, apretó en campo rival. Dicha ambición le permitió contar con una chance nítida de gol pero “Nacho”, tras buena maniobra para eludir la marca de Truglio, definió apenas desviado.
Después, en un desenlace intenso por la búsqueda de un Ticino que se topó con la destacada labor defensiva rival, sólo quedó tiempo para el golazo de Nicolás Rodríguez de tiro libre, a los 42’ minutos, y dicha conquista terminó de certificar una victoria difícil e importante para los “universitarios”.
La figura
Joaquín Hernández, tras un primer tiempo más predipuesto a la faz defensiva, atacó mucho más en el complemento y desequilibró cuando entró en acción, al punto tal que asistió en el primer gol y recibió la falta del segundo. Liendo, además de su cuota goleadora, también tuvo una producción destacable.
El árbitro
Sandro Viera sobrellevó bien el partido a raíz de su experiencia y, si bien obvió algunas faltas, acertó en su mayoría. Correcto en las expulsiones y criterioso para amonestar. El asistente Bertoglio acertó en el gol de Liendo, aunque dejó interrogantes en el tanto anulado a Freytes (pareció habilitado).
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