Desde el PJ

“Fue el 24 de Marzo de 1976 donde se vino a destruir específicamente la matriz industrial de clase media y generadora de valor agregado que había significado el primero y el segundo Gobierno peronista...”
Cristina Fernández

En 1976, como todos ya sabemos, nuestra Argentina fue sacudida una vez más por un golpe de Estado, en este caso cívico-militar, que derrocó del poder a María Estela Martínez de Perón e instaló una junta militar encabezada por los comandantes de las tres Fuerzas Armadas con el fin de una supuesta reorganización nacional.
Podríamos relatar y graficar como una línea del tiempo toda nuestra historia o basarnos solamente en el momento que dio inicio a la más horrenda de las dictaduras de nuestro país, que se basara en la tortura, la violación, la apropiación de niños, el asesinato masivo de prisioneros indefensos y el robo descarado de sus bienes como botín de guerra, de quienes pensaban diferente. Esto califica a la dictadura de Videla como un régimen nefasto e imperdonable y el peor que haya padecido la República Argentina… como expresó la presidenta Cristina Fernández: “No fue sólo un golpe, como nos hicieron creer, contra la subversión o contra los que empuñaban las armas (…). Fue algo mucho más terrible, porque en definitiva fue arrancarnos una matriz productiva, una matriz de identidad que permitió luego que vinieran otras generaciones que creían que no era conveniente arriesgarse tanto, porque no hay que ser malo y pensar qué es lo que nos pasó a los argentinos después de eso. El miedo, el miedo a ir un poco más allá por lo que podía pasar se instaló definitivamente y en base a ese miedo se siguieron arrancando derechos, destruyendo trabajos, terminando con las esperanzas y las ilusiones de la gente...”.
Analizando desde esta perspectiva histórica y situándonos al final de esta línea del tiempo imaginaria, asistimos a este 24 de Marzo de 2012, en donde bien podríamos poner como referencia que empieza a correr nuestro tiempo, es decir, todo lo que nosotros podamos hacer en adelante por nuestra Patria. Ya hemos escrito demasiado y nunca de más, la revalorización de la Política de DD.HH. que iniciara Néstor Kirchner y profundizada por la actual presidenta, bien podría ser suficiente todo lo hecho por ellos para destacarse en la Historia Argentina como los presidentes que más lucharon por los derechos humanos. Lejos de eso, vamos por más y hemos iniciado este año la batalla que tal vez fuera el icono más importante que marcó el final de la sangrienta dictadura, con una masacre de valientes jóvenes argentinos guiados por decisiones ebrias y manotazos de ahogo de las FF.AA., nos estamos refiriendo a la guerra ilógica por nuestras Islas Malvinas en 1982. En el Día de la Memoria, la Verdad y la Justicia, debemos reflexionar con el dolor de que nos queda por delante recuperar muchas identidades, entre otras cosas, pero debemos celebrar también que continúan los juicios a represores y que hemos iniciado la batalla de la diplomacia por recuperar nuestro territorio, porque somos un Gobierno democrático y que cree firmemente que la lucha es constante, pero debe darse en el campo de la palabra y no derramando sangre.
“La historia es un profeta con la mirada vuelta hacia atrás: por lo que fue y contra lo que fue, anuncia lo que será”, nos dice Eduardo Galeano, razón por la cual somos nosotros, el pueblo argentino, el que día a día debe luchar por su independencia, por sus derechos. Este Gobierno peronista nos marcó un rumbo, un proyecto de país con identidad, con igualdad y con oportunidades, depende de nosotros mismos las próximas páginas que se escribirán en nuestra Patria y por eso es tan importante tener memoria, saber la verdad y hacer justicia. Nunca Más, pero Nunca Menos.
Sebastián Capurro
Secretario General Partido Justicialista


Ateneo Eva Perón

La historia negra que comenzó un día como hoy, hace 36 años, con el golpe de Estado, debe dejarnos enseñanzas para que no repitamos las épocas más trágicas.
Aprender a valorar la democracia como un sistema que si bien es perfectible, resulta el mejor que conocemos, es la primera enseñanza que debe dejarnos esa época oscura del país. La democracia no es sólo elegir autoridades cada cuatro años, sino participar, integrar los partidos políticos y las organizaciones de bien público, para ser protagonistas de esta historia de construcción para un país mejor. La segunda enseñanza debe ser aprender a dejar atrás los miedos, para poder expresar lo que sentimos, manifestar disensos si es necesario y realizar los aportes para el crecimiento de la sociedad. Lo peor que nos puede pasar es que heredemos de la dictadura el miedo a participar y a expresarnos. Para que podamos mirar para adelante, cerrando las heridas del pasado, es indispensable la Justicia y el compromiso democrático de todos y todas. Por la Memoria, la Justicia y la Verdad.

Rosa Cámpora
Ateneo Eva Perón


Juventud Guevarista

El 24 de Marzo del año 1976 daba inicio el Proceso de Reorganización Nacional, dictadura feroz que culminaría con el regreso del parlamentarismo en el año 1983. Durante ese período a todos nos queda claro lo que acaeció: miles de compañeros desaparecidos, campos de tortura, represión indiscriminada, diversas formas de censura y tantos otros crímenes propios del terrorismo de Estado.
Es que tal período fue una respuesta para exterminar a los sectores organizados del campo revolucionario que habían logrado desestabilizar a un régimen capitalista repleto de injusticias e inequidades. Una vez finalizado el objetivo, aniquilado el peligro, se retiraron para dar lugar al actual régimen parlamentario. Creemos entonces que poco lugar hay que concederle al festejo.
Después de todo, fue gracias al aniquilamiento, a la sangre derramada de lo mejor y más revolucionariamente consciente de nuestra juventud, que hoy los Franco Macri, la Unión Industrial Argentina (UIA) y las empresas multinacionales que entre otras cosas saquean nuestros recursos, puedan gozar de su estabilidad socio-política, “democrática”-burguesa.
Es por eso que absolutamente todos los partidos políticos que conforman el actual régimen parlamentario participaron, de diversos modos, del dictatorial Proceso de Reorganización Nacional como, por ejemplo, la Unión Cívica Radical (UCR) con 310 intendentes, el Partido Justicialista (PJ) con 169 intendentes y el Partido Socialista (PS) con dos embajadores, hecho que condenamos y denunciamos. Como Juventud Guevarista (JG), integrando el Frente de Resistencia Nacional (FRN), no dejaremos de reivindicar a nuestros compañeros desaparecidos, pero tampoco dejaremos de reivindicar y, sobre todo, de luchar enérgicamente por sus ideales, que jamás dejaran de implicar igualdad, libertad y revolución. La lucha fue, es y será contra el capitalismo sin importar la fachada política y económica que éste dé a mostrarnos. Treinta mil desaparecidos. ¡Presentes! ¡Ahora y siempre!
Juventud Guevarista en el Frente de Resistencia Nacional