Escribe:
Fernando de Goycoechea

San Martín arrancó con un triunfo en el Torneo Preparación que organiza la Unión Cordobesa de Rugby. En condición de locales, los “Tricolores” superaron ayer por 17 a 3 a Los Cuervos de Bell Ville.
Para lograr el objetivo triunfal, los dueños de casa tuvieron que redoblar esfuerzos para superar a un rival difícil de vulnerar.
Con la decisión de invadir el ingoal por el lado del local y la firmeza para detener cada avance por parte de los bellvillenses, el resultado se mantuvo en tensión durante buena parte del tiempo de juego.
De todos modos, y a pesar de la gran cantidad de errores técnicos e infracciones cometidas, el “Sanmar” fue más práctico al momento de encarar el ingoal custodiado por sus invitados.
Amparados en el maul dinámico o lanzando a los gordos por los ejes cercanos a las formaciones, el “Tricolor” logró establecer algunas ventajas.
Otra de las armas que utilizaron los villamarienses fueron las patadas posicionales, aunque con escaso éxito.
En la primera parte, Diego Beletti (de buena actuación) desde su posición de octavo, además de poner siempre al equipo adelante, concretó el primer try del juego.
A los 22 minutos, Luciano Verón (falló dos penales), acertando su patada a los postes, descontó cifras en la pizarra.
Apostando por el lado de los forwards, San Martín volvería al try de la mano de Facundo Reale que apoyó en la zona de try tras varias fases penetrantes de sus compañeros.
En la segunda parte, el partido cayó en nivel e intensidad.
Los dirigidos por Ocampo, De Zárate y Morra intentaron, pero las desprolijidades y falencias para mantener el balón activo conspiraron en su plan de sumar puntos.
Por su parte, los discípulos del experimentado entrenador Carlos “Mono” Rossi si bien hicieron mucho mérito a la hora de defender, con guinda en mano carecieron de la cuota de agresividad necesaria para arrimarse al ingoal del equipo de tres colores.
A los siete minutos del final, y en una de las pocas llegadas concretas a la zona de extrema defensa, Federico Villegas se zambulló para decretar las cifras definitivas del encuentro.