Señor director:
La conmemoración de un nuevo aniversario del golpe de Estado de 1976, nos convoca a recordar a la mujeres y los hombres que dieron su vida cargada de sueños y esperanzas , con el objetivo de diseñar un proyecto de país que se sustentara en los valores de justicia y solidaridad.
El 24 de marzo nos ofrece no sólo la oportunidad de repudiar una vez más al golpe que causó tanto dolor al pueblo argentino, sino también de ejercer la memoria y transmitírsela a las nuevas generaciones.
Nuestra juventud debe tener siempre presente que tanto los compañeros militantes que quedaron en el camino como los que pudieron seguir en la lucha, estaban guiados por un noble ideal que era el de combatir la injusticia, cada uno desde su puesto de trabajo, persiguiendo el objetivo de lograr una vida digna para todos y cada uno de los argentinos.
Ejercitar la memoria consiste en hacerles saber a los jóvenes de ahora que sus pares de hace 36 años jamás hubieran transigido con aquellos que no tuvieran en claro los preceptos de dignidad y justicia social que guiaban su accionar porque eso hubiera constituido una traición a los mismos.
Si bien puede haber distintas manifestaciones de repudio al golpe, cada una tendrá la característica que le impriman sus autores y es seguro que entre ellas se encontrará una versión oficialista de los hechos acorde con el pensamiento de los que detentan el poder, que generalmente están lejos de las interpretaciones populares
La movilización social ha sido la herramienta fundamental para prolongar en el tiempo la utopía de un mundo justo para todos, por el cual lucharon todos los compañeros desaparecidos.
Memoria, verdad y justicia son principios esenciales para construir la esperanza que algún día, sin que pase mucho tiempo, tendremos un nuevo país, un nuevo continente y un mundo nuevo.

Raúl Gerardo Quevedo
DNI 6607294