El Tribunal Oral Federal Nº 2 de Córdoba condenó ayer a prisión perpetua a los ex integrantes del Comando Radioeléctrico de la Policía de la Provincia por el fusilamiento de tres militantes de la Juventud Universitaria Peronista (JUP), en 1976.
El tribunal, integrado por los jueces José María Pérez Villalobo, Carlos Lascano y Fabián Asís condenó ayer a cadena perpetua a los ex policías Pedro Nolasco Bustos (57), Jorge Vicente Worona (65) y el olivense José Filiberto Olivieri (67), por el asesinato de los jóvenes Carlos Delfín Oliva (26), Ana María Villanueva (20) y Jorge Diez (23), por el hecho ocurrido el 2 de junio de 1976.
Angel Villanueva, hermano de Ana, uno de los tres militantes de la JUP, señaló que con la condena a prisión perpetua de los ex policías "se cierra un capítulo muy doloroso".
Visiblemente emocionado, el único querellante en la denominada "causa Roselli" dijo que se sentía "feliz" tras conocer el fallo del tribunal que condenó a cadena perpetua a los ex policías por el fusilamiento de los militantes de la JUP.
"Acá hubo un juicio justo", indicó Villanueva en declaraciones a la prensa, donde hubo genocidas que los sentamos en el banquillo de los acusados y por las pruebas contundentes, el tribunal dictaminó que debían cumplir una sentencia a prisión perpetua."
"Con esta sentencia se cierra un capítulo muy doloroso, pero también comienza otro de lucha y compromiso para que se continúe con estos juicios y se termine con la impunidad", concluyó.
Por su parte, María Cristina Villanueva señaló que a Ana, su hermana asesinada, "la veo en toda la gente que me da la mano y en toda la gente que me abraza".
"Yo siento -añadió- que con esta justicia donde se condenó este crimen cometido con alevosía, secuestros y terrorismo con cadena perpetua, Ana descansa en paz."
No obstante indicó que con esta sentencia "no terminamos aquí. Vamos a seguir y vamos por más. Ahora terminó una historia personal, pero vamos a seguir con la lucha para que se termine definitivamente con la impunidad".