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Leonel Campregher se presentó ayer en Tribunales junto a su abogado. Allí también se hará la rueda de reconocimiento |
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El joven albañil que era buscado intensamente por la Policía desde el pasado lunes, acusado de haber violado a una menor de 14 años en la localidad de Tío Pujio, se presentó espontáneamente ayer en el Palacio de Justicia local y quedó detenido a disposición del fiscal de Instrucción del Segundo Turno, Gustavo Atienza.
Se trata de Leonel Alejandro Campregher, de 24 años de edad, quien concurrió a Tribunales acompañado por el abogado Fabián Presuttari, quien asumió formalmente la Defensa del sospechoso.
Campregher y su defensor llegaron al edificio de calle General Paz 331 pasadas las 10.30 y luego de unos breves trámites administrativos el fiscal que instruye la causa ordenó su detención e inmediato traslado a la Comisaría de Distrito, donde quedó alojado provisoriamente.
El trabajador de la construcción está imputado como supuesto autor de “abuso sexual con acceso carnal”, un delito que es legislado por el artículo 119 del Código Penal de la Nación y reprimido con prisión de seis a 15 años.
Reconocimiento
Si bien aún no se resolvieron formalmente los pasos procesales a seguir, es muy probable que mañana o durante los primeros días de la semana venidera el fiscal Atienza disponga la realización de una rueda de reconocimiento para que la menor determine si el joven detenido es la misma persona que ella había identificado como “José Luis” Campregher, circunstancia que demoró la tramitación de la causa porque no existe ninguna persona llamada de esa manera.
Si el reconocimiento es positivo, el instructor judicial fijará fecha para tomarle al acusado declaración indagatoria, que probablemente se concrete jueves o viernes de la próxima semana.
En las afueras
La víctima del hecho que se le atribuye al albañil tiopujiense es una adolescente que denunció haber sido abusada sexualmente la noche del 29 de enero pasado en una zona de monte que se encuentra sobre calle Buenos Aires, frente a una fábrica de cuajo, en las afueras de la vecina localidad.
Tal como lo anticipó EL DIARIO en su edición de la víspera, el sospechoso habría violado a la menor luego de interceptarla con su camioneta Chevrolet en momentos que se dirigía en bicicleta desde la casa de una compañera de la escuela hasta el domicilio de su abuelo materno, donde se encontraban sus progenitores.
Siempre de acuerdo a la denuncia que dio inicio al expediente judicial, Campregher utilizó un cuchillo para reducir a su víctima y, colocándole la hoja en el cuello, la sometió a sus bajos instintos, para luego abandonarla en el lugar del ataque sexual.
Esa misma noche la Justicia obtuvo muestras de semen mediante hisopados vaginal y anal, y a mediados de febrero la menor relató minuciosamente lo acontecido a través de una Cámara Gessell realizada en Tribunales.
A las 23.30 de aquel domingo, la adolescente fue trasladada por personal de Bomberos Voluntarios de la vecina localidad hasta el Hospital Pasteur, donde fue sometida a una serie de estudios y pericias médicas en las cuales se obtuvieron las muestras de semen (y con ellas, el ADN del violador), ante la presencia de un médico policial y de un representante de la Fiscalía de Feria, por entonces a cargo de Daniel Del Vö.
Escupitajo en la calle y exposición policial
Una fuente vinculada a la investigación de este caso indicó que el martes por la noche la mamá de la chica abusada se presentó en el Destacamento Tío Pujio, donde radicó una exposición contra uno de los hermanos de Leonel Campregher.
Según relató la mujer en la sede policial tiopujiense, cuando se conducía en bicicleta llevando a su pequeño hijo, y mientras era acompañada por la menor en un rodado similar, se topó de frente con el segundo de los tres hermanos Campregher, que también guiaba una bicicleta, pero en sentido contrario.
Al cruzarse en plena calle y sin que mediaran palabras, el joven le lanzó un escupitajo que dio de lleno en el cuerpo de la mujer, lo que desató la angustia de la adolescente ante la sorprendida mirada de su hermanito.
Según trascendió, la progenitora de ambos menores sólo guardó silencio, pero desde allí mismo se dirigió al Destacamento, donde realizó una exposición de lo sucedido alrededor de las 19.30 en las inmediaciones de la esquina de Tucumán y Belgrano.
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