El Centro Educativo República de Bolivia buscará que a fin de año los padres sepan identificar los problemas de sus hijos y sean capaces de dar posibles soluciones a esos asuntos. Ese es apenas uno de los tantos objetivos que se plantearon desde la escuela, según el proyecto del taller para padres que pondrá en marcha este año el establecimiento conducido por Stella Faró.
“Los fenómenos de violencia e inseguridad forman parte de la realidad, del mundo. No es casual por ello que el ‘Panorama Social’ que publica la Comisión Económica para América Latina, habitualmente dedicada a temas como empleo, educación, salud, vivienda, haya comenzado a incluir un capítulo sobre seguridad ciudadana y violencia. Según este informe, la violencia está creciendo”, advirtió la directiva. “La violencia familiar es uno de los problemas más graves. El maltrato a la infancia es la expresión más elocuente de la ruptura de los vínculos de responsabilidad entre las generaciones”, abundó.
Remarcó que el maltrato y el abuso y demás situaciones que significan una “vulneración de los derechos de la niñez y del adulto, no constituyen un hecho privado porque todo lo que concierne al desarrollo integral de un niño es un asunto de interés público”.
Faró indicó en la argumentación del taller de padres que “cuando se nace en un ambiente de violencia se vulnera la identidad, afecta la potencialidad de aprendizaje y la integración con su ambiente”.
“La escuela debe convertirse en un espacio de reparación”, recalcó la docente. Y esto debe darse desde diversas perspectivas, por caso: “Desde un gran número de procesos y mecanismos de defensa, la calidez afectiva, el apuntalamiento de la autoestima, la integración grupal, la idealización y el fortalecimiento de la capacidad de imaginar un futuro mejor”. Por otro lado, “utilizando los propios procesos de aprendizaje, en niños y adultos”.
“El trabajo intelectual, la capacidad narrativa, la expresión artística o deportiva, el acompañamiento, la contención familiar y el éxito en el proceso escolar son también factores que permiten fortalecer las capacidades para superar las secuelas del maltrato”, fundamentó.
“La escuela debe estar preparada para actuar, consciente de sus posibilidades y limitaciones. El trabajo en equipo y la intervención interinstitucional son modalidades muy necesarias para actuar frente a este tipo de situaciones”, afirmó.
El taller para padres, que se desarrollará en tres ejes durante el año (ver Los ejes...), pretende que, al concluirlo, los progenitores conozcan el reglamento escolar, el contenido de la Ley del Menor 26.061, identificar problemas de sus hijos y brindar posibles soluciones y que sean capaces de practicar “los valores en familia”, según se detalló.
El espíritu del mismo pasa por plantearse “el rol de la familia y la escuela en los procesos de subjetivación y formación integral de niños y niñas en los nuevos escenarios sociales”.