Un método peligroso

El filme está dirigido por el canadiense David Cronenberg, en su nuevo horizonte temático alejado ya de lo bizarro y terror biológico como “La Mosca” o “Scarner”, y cuenta con la actuación del argentino y nuevo “alter ego” Viggo Mortensen (en su tercer película juntos, luego de “Una historia violenta” y “Promesas del Este”).
Está basado en la obra teatral “The talking cure” de Christopher Hampton, quien a su vez se basó en la novela de John Ken para plantear una historia con trasfondo sexual e intelectual que cambiará la dirección del pensamiento moderno. Según los comentarios indican que la obra es muy específica técnicamente y recomendable para estudiantes o entendidos en el tema, puesto que generalmente su desarrollo está asentado en lo discursivo sobre el tratamiento científico de la problemática.
La trama aborda a Carl Jung a sus 29 años, cuando está empezando su carrera profesional y vive en el hospital Burghalzi con su esposa embarazada. Jung ensaya el tratamiento experimental inventado por Freud, el psicoanálisis, o “curación por la palabra”, teniendo como paciente a Sabina Spielrein, de 18 años, joven rusa, muy culta, con un diagnóstico de histeria que puede llegar a la violencia.
En sus conversaciones con Jung revela haber tenido una infancia plagada de humillaciones y palizas que le infligió un padre autoritario. El psicoanalista no tarda en sacar a la luz un inquietante elemento sexual en su disfunción, apoyando la teoría de Freud que relaciona la sexualidad con desórdenes emocionales. A partir de este caso, Jung y Freud traban amistad a través de un intercambio epistolar acerca de Sabina, el tratamiento tiene éxito y Sabina decide convertirse en psiquiatra con el apoyo de Jung. Directa y fría recorre el inicio del psicoanálisis, con un sesión de psicoterapia con distintas discusiones intelectuales sobre la represión sexual, la neurosis y el masoquismo como método de excitación.
Los protagónicos están compuestos por Michael Fassbender como Carl Jung, Viggo Mortensen en el papel de Sigmund Freud, Keira Knightley la paciente histérica y Vincent Cassel como Otto Gross, un paciente libertino que está dispuesto a rebasar los límites.

Los Vengadores

Una reunión cumbre con los superhéroes de Marvel se hace presente en el SudCinemas. Ellos son Ojo de Halcón (Jeremy Reiner), El increíble Hulk (Mark Ruffalo), El Capitán América (Chris Evans), Thor (Chris Hemsworth), Iron Man (Robert Downey Jr.) y Natasha Romanoff y La Viuda Negra (Scarlet Johansson).
Loki, el dios hermanastro de Thor, está empeñado en destruir el planeta y para contrarrestarlo el director (Samuel Jackson) de la agencia Pro Paz Mundial, SHIELD, convoca inmediatamente y comanda a estos vengadores para salvar al mundo de la destrucción, mientras que Nueva York está semidestruida por los invasores extraterrestres dirigida por el malvado Luki.
Con la dirección de Joss Whedon (de Buffy, La Cazavampiros) y un presupuesto de 220 millones de dólares, los superhéroes que nacieron en 1963 se reúnen en 2012 para arrasar con las boleterías.

Espejito, espejito

Nuevamente el personaje de Blancanieves aparece en cartel para contar un historia remozada. Después de la desaparición del rey, su mujer despiadada toma el control del reino manteniendo escondida en el palacio a su hijastra de 18 años de edad, la hermosa Blancanieves.
Pero cuando la princesa atrae la atención de un príncipe azul y rico, la reina celosa destierra a la niña a un bosque cercano. Acogida por un grupo de enanos rebeldes, Blancanieves se transforma en una mujer joven y valiente decidida a salvar su reino. Con el apoyo de sus nuevos amigos, se pone en acción para reclamar su derecho y recuperar al príncipe en una mágica aventura. Dirigida por Tarsen Singh (Inmortales) está interpretada por Lily Collins como Blancanieves y Julia Roberts como la villana de turno.