“La Federación Agraria viene trabajando hace tiempo con nosotros en la Unidad Ejecutora que es la que rige qué se va hacer con los fondos de la Ley en la provincia de Córdoba y ha puesto todo para que esto salga como está saliendo hoy”, inició Alberto May en su diálogo con un periodista de este suplemento que cubrió las instancias de las Jornadas Ovinas que concluyeron ayer en Arroyo Cabral.
Luego abordó la temática convocante desde ese punto de partida: “Hace 10 años que venimos trabajando de esta manera, se hicieron jornadas en otros lugares, nunca con tanta gente como en ésta, pero vamos difundiendo con charlas, con jornadas, con capacitación en todos los lugares de la provincia y siempre la ganadería de 2002 a la fecha ha crecido en su stock”.
Planificación
“Con la planificación que hicimos del año 2002 por 10 años, debo decir que hemos cubierto las expectativas porque aumentó el 44% el stock de ganadería ovina, cuando en otras provincias ha decrecido por distintas causas, como sequía, nevadas o por las cenizas del volcán. Nosotros creemos que si seguimos trabajando articuladamente con otras entidades, tanto oficiales como privadas, podemos llegar a tener el millón de cabezas de ganado ovino, primero porque contamos con un gran potencial en la provincia de Córdoba, y segundo porque tenemos zonas agro ecológicas distintas y donde se quiera puede andar bien el ovino”, explicó.
Insistió en que la planificación para alcanzar esa cifra la hicimos a 10 años, como lo exige la Nación y cubrimos las expectativas en la primera oportunidad, o sea que proyectamos bien, porque en esta primera etapa queríamos alcanzar este escalón (las cifras oficiales rondan los 236 mil)”.
“Sigue siendo alternativa y complementaria porque puede andar bien con cualquier otro tipo de producción, pero eso no quiere decir que no crezca, porque también hay en la provincia productores puros de ganadería ovina. La expectativa nuestra es que siga creciendo, para ello avanzamos con la difusión, la capacitación y el asesoramiento para la presentación de proyectos para créditos a los que se puede acceder fácilmente y devolviendo el valor nominal (o sea la misma cantidad de dinero otorgada)”, manifestó el especialista.
Si hubiera, para May, un ranking de producción ovina hoy, “aparecerían en primer lugar las provincias del sur, pero en términos relativos quien ha aumentado más en los últimos años, Córdoba ha subido mucho, un 44%, mientras otros, por distintos problemas, han bajado. O sea que la proyección es buena”.
“Nosotros no estamos fomentando una actividad que no es rentable y la podemos probar con números. Riesgo hay en todas las producciones, aunque menos en la ganadería que en la agricultura. Lo que tiene de bueno la ganadería es que hace que la gente se quede en el campo y que haya mucha más mano de obra que en la agricultura”, afirmó.
Qué falta
Consultado sobre qué falta para dar el salto o asegurar un crecimiento sostenido, May resumió: “Estamos trabajando bien en la producción de lana, ya tenemos cuatro centros de acopio, y hay que decir que antes esa lana se quemaba y ahora se vende. La estamos comercializando en concurso con empresas, se han vendido 28 mil kilos el año pasado de distintos centros de acopio de la provincia… Con lo que estamos en deuda es en la comercialización de carne, que a pesar de tener capacidad instalada en la provincia de Córdoba no logramos que se forme la cadena como tiene que ser entre los frigoríficos y los productores”.
Respecto al frigorífico móvil, dijo que “se está proyectando junto al INTI, el Senasa y el Gobierno de la provincial. La provincia tiene un montón de capacidad ociosa en los frigoríficos hoy. Lo que tienen que entender es que en una cadena productiva todos tienen que ganar más o menos lo mismo y no ser los productores siempre los que menos ganan, y la parte de comercialización es la que se lleva casi toda la plata. No así la de la industria, pero igual, tenemos que articular y trabajar más intensamente en estos 10 años”.
La mirada del
Gobierno provincial
Para el secretario de Ganadería, Daniel Carignano, “estas producciones alternativas están siendo miradas particularmente desde el Gobierno provincial”.
Es más, señaló que “no diría que estamos en una jornada ovina provincial. Yo no diría que estamos ante una producción alternativa, estamos frente a una producción que tranquilamente puede convivir con otras producciones, por ejemplo, potencia la rentabilidad de un campo con ganadería bovina. También puede hacerlo con la soja. Hoy nosotros vemos que un campo sojero está parado si no tiene rodeos y hay experiencias que confirman lo que digo. Todo ese verde que crece entre el cultivo (y que a veces le pasamos Round-up), hay que aprovecharlo racionalmente con un pastoreo rotativo para que se genere todo el tapiz que necesita la oveja para alimentarse y así producir una buena rentabilidad".
“En los distintos eslabones que tiene la cadena ovina, lo que estamos atendiendo ahora es la producción primaria y haciendo los esfuerzos para que se armen cada vez más grupos de productores ovinos y así se puedan consolidar en grupos asociativos y, en donde tenemos la espada de Damocles -que es el faenamiento y comercialización- haya más posibilidades de desarrollo. Por eso ahora estamos viendo qué frigoríficos están en condiciones de faenar ovinos, armar un sistema de recolección para llevarlos todos juntos a faena y ver quién los comercializa después. Y segundo, los lugares distantes a frigoríficos, por lo que estamos armando con el INTI y el INTA la ingeniería de montar un frigorífico sobre una plataforma móvil para ver si con eso le damos un respiro y suplimos las problemáticas de la faena, aunque no se trata de falta de frigoríficos, que no es tanta, sino que no están operables para ovinos. Hay que hacerles modificaciones, por eso el frigorífico móvil”, explicó respecto a uno de los planteos de los propios productores y que se viene analizando desde el Estado provincial.
Añadió que, por ejemplo, “el caso del frigorífico de Bell Ville, con el que ya hemos conversado, allí podríamos recolectar a 60 kilómetros a la redonda…”.
Y sostuvo que “también esta tarea se estaría trasparentando y legalizando la comercialización y la producción ovina”.
Respecto a las líneas de financiamiento, “créditos y aportes no reintegrables”, Carignano marcó “la importancia de la Ley Ovina, pero además las posibilidades a través de la Fundación Banco de Córdoba, con préstamos de hasta 30 mil pesos para compra de machos, madres o mejorar sus instalaciones, entre otras cosas”.
“Lo que más necesitamos y nos cuesta mucho, es que la gente, los productores comiencen a asociarse. Si no logramos que entienda que si no empieza a vender en conjunto su borrego y empieza a meterse en la cadena de comercialización no va a lograr un buen desarrollo”, dijo Carignano.
El secretario, se refirió además a los mercados posibles: “El mercado está dentro y fuera del país. Nosotros hoy tenemos exportadores a Dubai que nos piden si tenemos un container de carne de oveja y de cabra, ni siquiera el cabrito que consumimos nosotros. Hay tanto mercado externo como el interno que hoy no está abastecido, porque vas a la carnicería y no conseguís una chuleta, una pata de carnero, no tenés cortes. Y eso se estará hablando en estas Jornadas, también”.
Fotografías: 1) Alberto May, coordinador de la Ley Ovina
2) Daniel Carignano, secretario de Ganadería de Córdoba
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