El sacerdote Gustavo Gatto, como asesor de la Pastoral, junto a Valeria y Matías, dos jóvenes de la Diócesis de Villa María, fueron parte de un encuentro de un centenar de chicos y chicas de todo el país para celebrar al “Dios de la vida”.
En el marco de la XXV Asamblea Nacional de Pastoral de Juventud, dirigentes de más de treinta Diócesis y de movimientos nacionales y no nacionales confluyeron en la Casa de Espiritualidad La Asunción en Bahía Blanca, para “seguir construyendo juntos la civilización del amor”.
La Asamblea Nacional es la máxima instancia de participación y decisión de la Pastoral de Juventud y versa sobre diversos aspectos del funcionamiento y objetivos de la misma.
Entre otros anuncios, decisiones y actividades, se presentó el IV Gesto Común de la región Cono Sur, integrada por Argentina, Brasil, Uruguay, Paraguay y Chile. Se propuso que en la semana del 5 al 12 de agosto los jóvenes de todo el país, bajo el lema “Si pinta joven, pinta vida”, lleven a cabo una pintada de murales en lugares públicos, en el marco de “la defensa de la vida y como respuesta a las diversas formas de violencia de la que son víctimas los jóvenes”, de acuerdo a lo precisado por Gatto.
El cura párroco apuntó que los asambleístas realizaron un pregesto mediante una primera pintada luego de un trabajo de reflexión grupal. Monseñor Bokalic había destacado: “Si queremos desarmar la violencia, necesitamos meternos adentro. Mirar a Jesús para vivir la cercanía, sin actitudes de enjuiciamiento, simplemente acercarnos y hacerles sentir que nos interesa su vida. Esto está en la base de muchas acciones. Crear vínculos, solamente el amor sana”.
En un tramo de su mensaje, la XXV Asamblea Nacional de Pastoral de Juventud Casa de Espiritualidad La Asunción señaló que “queremos sumarnos a la reflexión que están haciendo muchas pastorales juveniles del continente, preocupados por la violencia que son víctimas los jóvenes de nuestras diócesis, especialmente los más pobres”.
Por otro lado, de cara a la visita del año próximo del Papa Benedicto XVI, se recordó la presencia, hace 25 años, de Juan Pablo II “a nuestras tierras en el marco de la Jornada Mundial de la Juventud de 1987 celebrada en Buenos Aires”. La futura visita del Sumo Pontífice “nos lleva a preparar el corazón para esta fiesta como Iglesia latinoamericana, que vive una misma fe y comparte una misma cruz”.
La próxima Asamblea Nacional se llevará a cabo en el feriado del 20 de junio. Las Diócesis que ofrecieron ser anfitrionas fueron Santiago del Estero y Arquidiócesis de Buenos Aires.