El lunes gris que tuvo la cuidad ayer por la mañana resultó más oscuro para Alumni, cuyo plantel de Argentino A resolvió no comenzar los entrenamientos luego de enterarse, en una reunión con los dirigentes, que no hay dinero para los sueldos.
En el día pautado para retomar las prácticas de cara a la Promoción, los jugadores se presentaron en su mayoría al predio del club, pero ni siquiera se cambiaron.
Cerca de las 9.20, exactamente nueve dirigentes, entre los de Comisión Directiva y Unidad de Gestión, se reunieron con los futbolistas y allí les informaron que no pudieron conseguir el dinero para cumplir con los sueldos, ni siquiera para completar el mes de febrero.
“No llegamos ni a la mitad para pagar febrero y, cuando cumplamos ese mes, ahí nomás se nos viene el otro y el panorama es más complicado todavía”, reconocieron luego los directivos, en rueda de prensa.
Tras conocer la situación, los jugadores se reunieron para definir los pasos a seguir y, si bien no hubo un acuerdo común, coincidieron en reclamar el pago de febrero, aunque sea para comenzar a entrenar.
Al margen de esto, el cuerpo técnico debió esperar a un costado y quedó a disposición de la resolución de los jugadores.
Finalmente, antes de las 10.15, los futbolistas emprendieron la salida del predio y se volvieron a sus casas, a la espera de algún llamado dirigencial que les devuelva la esperanza de los sueldos.
De todo el plantel, los únicos que faltaron fueron algunos de los que jugaron el domingo por la Liga Villamariense, más Maximiliano Rosales y Marcos Godoy, dos ausentes con aviso. Tampoco estuvo el delantero Diego Manicero.
No obstante, se presentaron los arqueros Sebastián Hernández y Jonathan Scalzo; los defensores Diego Villagra, Joaquín Lencinas, Facundo Depetris y Juan Salort; los volantes Sergio Zanabria, Federico Silvestre, Juan Aimar, Ezequiel Reina y Matías Bolatti, y los delanteros Lucas Gómez, Víctor Rena y Federico Depetris.
Todos intuían que podían encontrarse con un panorama desolador, aunque algunos se sorprendieron porque ni siquiera hubo una cuota de febrero.
Por ese motivo, no tardaron en ponerse de acuerdo para suspender cualquier actividad dentro del club hasta que los dirigentes consigan el dinero.

@ “Gravisima”

Los dirigentes, en tanto, no escaparon al problema, pero reconocieron que la situación se tornó “insostenible” y “gravísima”, además sostuvieron que “la fuente de recursos ya no alcanza”.
Concretamente, para cumplir febrero, Alumni necesita 150 mil pesos, pero para cubrir lo que realmente hace falta y tener al plantel al día (como para pensar en un trabajo serio de cara a salvar la categoría), el monto llega hasta los 500 mil. Sólo así se podrá pagar hasta abril.
En ese sentido, si no pueden abonar siquiera febrero, los directivos están muy lejos de cumplir con las expectativas y es muy difícil avizorar cuándo retomarán el trabajo los jugadores.
“Hasta que no cobremos la totalidad de febrero y luego nos comiencen a pagar marzo, no vamos a empezar; ya hemos aguantado bastante”, sostuvieron los futbolistas consultados.
Luego del anuncio del “cese de actividades” del plantel, los directivos le confesaron a la prensa que “es entendible lo que dicen los jugadores”.
Entre los miembros de la Comisión Directiva y la Unidad de Gestión, se encontraban el presidente del club, Guillermo Morelatto, Eduardo Luis Rodríguez, Adrián López, Hernán Giberti, Guillermo Tibaldi, Aureliano Sánchez, Mario Barbisán, Fernando Salort y Claudio Alvarez.
Casi todos dijeron lo suyo y dejaron entrever que “no hay división” en el seno de la institución, más allá que EL DIARIO maneja otra versión y pudo saber que hay diferencias internas sobre las formas que cada parte expone para salir del conflicto.
En ese sentido, habrá que ver cómo sigue la historia en las próximas horas y si aparece alguien o algo que pueda sacar al club de esta situación caótica que atraviesa.
“Nos ingresa el dinero de algunos sponsors, como así también 22 mil pesos de AFA (en realidad son 25, pero la entidad madre del fútbol argentino hace un descuento) y tenemos algo de ayuda del municipio, pero concretamente es un chorrito en una manguera grande por donde sale más del doble”, graficaron los directivos.
Además, dijeron que todavía no hay decisiones de Talleres de Córdoba y Cúcuta de Colombia por la compra de los pases de Román Strada y Carlos Herrera, respectivamente, quienes se encuentran a préstamo -con opción- en esas instituciones.
Tal vez una colecta por parte de los hinchas o una movida semejante sirva como para paliar este mal momento. “Todo es necesario”, coinciden los dirigentes.
El caso es que Alumni debe jugar la Promoción cerca del 17 de junio y, así como está el panorama, será muy complicado mantener al plantel para luego conservar la categoría.
En ese aspecto, el único representante villamariense en el fútbol nacional se encuentra cada vez más cerca del Argentino B.