Noche de recuerdos, emociones, reconocimientos y de palabras que recalcaron la destacada función que abarca el fútbol infantil. Así se desarrolló una velada especial de una de las instituciones deportivas más significativas de la ciudad y la región, que cumplió 35 años de vida cobijando ilusiones y aventuras imborrables en los niños.
Con la total participación de sus actuales clubes y la actual Comisión Directiva, la Liga de Baby Fútbol celebró, el pasado viernes por la noche, su nuevo aniversario dentro de un marco en el que predominaron las palabras, agradecimientos y reconocimientos.
Con el acompañamiento político local y notables ausencias (ex directivos y entrenadores que dejaron su impronta en la gran historia del baby fútbol y la ausencia de algún representante de la Liga Mayor, que igual acercó una plaqueta), también estuvieron en el evento los integrantes del Tribunal de Penas, representantes de la entidad que nuclea a los árbitros que dirigen domingo a domingo y autoridades municipales y provinciales.
De principio a fin, la fiesta contó con voces que dejaron evidenciado el valor e importancia que se impregna en el corazón de cada uno de los que transitó y transita la etapa del baby fútbol.
Así empezó la noche, ya que en la apertura de los festejos, cuando Darío Ranco, quien en carácter de legislador provincial y, principalmente, como hombre del fútbol (preside la Federación Cordobesa de Fútbol), le hizo entrega a la Liga de Baby Fútbol la plaqueta correspondiente de la Legislatura provincial por el aniversario, recibiendo la misma por parte de la entidad deportiva Jorge Alamo, uno de los fundadores.
Además, Ranco destacó la importancia del fútbol como función social y recordó en sus palabras a uno de los clubes pioneros del fútbol infantil, como lo fue Olimpia (donde jugó su hermano Rudy) y también a dos grandes e inolvidables directivos del fútbol infantil como fueron Antonio Roganti y Héctor Maccarini (padre).
Entre las restantes autoridades que dijeron presente y expusieron sus palabras estuvieron José Escamilla (presidente del Consejo Deliberante de nuestra ciudad), Adrián Arzeno (representante del Ente de Deporte, Turismo y Recreación de la Municipalidad local) y la legisladora Graciela Sánchez.
Escamilla, quien dio a conocer que jugó en Deportivo Felipe Gutiérrez en las canchas del “Mar Rojo”, que se ubicaban donde actualmente está la Medioteca, resaltó la evolución del baby fútbol en el transcurso de los años, a la vez que Arzeno detalló que el baby, fundamentalmente, deja en todos recuerdos de felicidad y un aprendizaje importante en diferentes valores de la vida.
A su vez, Sánchez, quien también resaltó el gran significado en la faz humana que brinda el fútbol infantil en cada niño, hizo entrega de la Bandera de nuestra provincia a la Liga de Baby y con el compromiso de gestionar una para cada club para que la misma esté presente en cada cancha del baby, en una iniciativa elogiable.Antes de las palabras de las autoridades, los principales directivos de la actual dirigencia del baby fútbol, César Martellono (presidente) y Mauro Beltrami (vicepresidente), también manifestaron su orgullo por ser partícipes de los festejos y agradecieron el acompañamiento de los clubes, como así también instaron a continuar trabajando para seguir mejorando a través de pasos cortos pero seguros.
Beltrami, además, destacó que es vital la función de los grandes, en especial de los dirigentes y padres, para que el baby fútbol, más allá de la competencia en sí, sea principalmente el lugar donde los chicos puedan disfrutar, hacer amigos y pasar momentos de felicidad.
También fueron gratas las palabras del referí Gabriel Chiaraviglio, quien resaltó que “dirigir a chicos es especial y trabajamos en ese sentido, en respetar a los chicos”, y la noche tuvo su pico de emoción cuando Alberto “Toto” Perazzi, cuyo nombre lleva el actual torneo, recibió el respectivo reconocimiento quien, muy emocionado, agradeció el destacado gesto hacia su persona o cuando el representante de San Nicolás, uno de los últimos clubes en sumarse al baby fútbol, expuso ante los presentes.
Sobre el final, los que concurrieron celebraron el cumpleaños, levantaron la copa y brindaron por el crecimiento del baby y, principalmente, para continuar trabajando con esfuerzo, honestidad y el compromiso para los verdaderos protagonistas de esta gran aventura que es el baby fútbol: los niños.