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Luis Cáceres volvió a sentarse ayer en el banquillo de los acusados, y recibió una condena que lo dejará en la cárcel hasta el 30 de abril del año próximo. Fue declarado reincidente por tercera vez y deberá cumplir la pena en forma completa |
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A requerimiento de la Fiscalía y con el acuerdo de la Defensa, la Justicia de Villa María le impuso una pena unificada de dos años de prisión a un changarín del Mercado de Abasto, que participó en una reyerta entre vecinos en barrio San Nicolás de esta ciudad.
Se trata de Luis Alberto Cáceres, alias “Teté”, quien fue declarado autor responsable de “amenazas calificadas” en contra de Rubén Heredia y su hermana Roxana Alejandra, quien instantes después de la pelea murió apuñalada por un sobrino del condenado, en un hecho de confusas circunstancias que todavía está en instrucción judicial.
Cáceres, de 35 años de edad, deberá cumplir la totalidad de la pena impuesta en la víspera, ya que fue declarado reincidente por tercera vez y difícilmente pueda acceder al beneficio de la “libertad asistida”.
Lo que sucede es que volvió a delinquir menos de 30 días después de haber salido de la cárcel, lo que seguramente se considerará un antecedente negativo si llega a solicitar la aplicación de aquel instituto legal, que permite el egreso seis meses antes del cumplimiento total de la pena.
Así las cosas, “Teté” Cáceres recién dejaría el Establecimiento Penitenciario Nº 5 el último día de abril del año próximo, ya que se encuentra detenido precisamente desde esa fecha de 2011.
s La “probation”
La audiencia de ayer, prevista para las 8.30, se vio demorada en su inicio porque a primera hora el abogado Eduardo Luis Rodríguez, defensor de “Teté” Cáceres y de su hermano Claudio Daniel Cáceres, alias “El Negro Ton”, presentó en Secretaría un pedido de “suspensión del juicio a prueba”, más conocido como “probation”.
Finalizados los trámites administrativos de rigor y ya con Claudio Cáceres fuera del proceso oral y público, al menos hasta tanto la Cámara resuelva si concede o no la referida suspensión, en la sala del quinto piso dio comienzo la audiencia presidida por el camarista René Gandarillas, y de la que también tomaron parte el fiscal en lo Correccional, Horacio Pedro Vázquez, la secretaria Marcela Mattalía y el abogado Rodríguez.
Pelea mortal
Por Secretaría se le dio lectura a la pieza acusatoria, en la que se describió que el 26 de abril de 2011, alrededor de las 22, los hermanos Rubén y Roxana Heredia se encontraban en su vivienda, sita en calle Nicolás Sarno 243, en barrio San Nicolás, junto a la casilla de gas y comiendo una pizza, mientras que en la casa contigua, en el techo de la misma, se hallaban el menor B.C. y su novia, instalando una antena de televisión.
Entre éstos se suscitó una fuerte pelea verbal, hasta que arribó al lugar Claudio Cáceres, padre de B., y su hermano Luis Alberto, tío del menor, quienes se involucraron en la discusión.
El incidente pasó a mayores y culminó con la muerte de la joven, de 21 años, a manos del chico, por entonces de 15, quien a la fecha permanece internado en un Instituto de Menores en la capital provincial, acusado como presunto autor del delito de “homicidio en riña”.
Las amenazas
En ese contexto, la acusación que recayó sobre “Teté” Cáceres se produjo a raíz de que éste se bajó de la motocicleta en la que se conducía y, esgrimiendo un arma blanca en su puño derecho, se dirigió a los hermanos Heredia, diciéndoles: “Ustedes no saben con quienes se están metiendo, les vamos a quemar todo… los vamos a matar a todos”.
Esta intimidación llevó al fiscal de Instrucción Gustavo Atienza a calificar la conducta de “Teté” Cáceres bajo la figura delictiva de “amenazas calificadas”, a tenor de lo descripto por el artículo 149 bis del Código Penal de la Nación.
Dicha norma legal establece que “será reprimido con prisión de seis meses a dos años el que hiciere uso de amenazas para alarmar o amedrentar a una o más personas”, y luego precisa que “la pena será de uno a tres años de prisión si se emplearen armas, o si las amenazas fueren anónimas”.
Luis Cáceres declaró sobre condiciones personales y luego, ya refiriéndose al trágico incidente, reconoció su responsabilidad en el hecho, confesión que posibilitó que el juicio fuera “de trámite abreviado”, con lo cual se omitió la recepción de pruebas testimoniales en la sala.
Cáceres nació en Villa María el 14 de octubre de 1976, es padre de dos hijos de 14 y 15 años que viven con la madre, se gana la vida haciendo changas en el Mercado de Abasto y al momento de ser detenido, el 30 de abril de 2011, estaba domiciliado en Concejal Pierantonelli 94, en el ya citado barrio San Nicolás de esta ciudad.
La misma noche del trágico incidente, el fiscal Atienza ordenó la captura de los hermanos Cáceres, quienes se presentaron ante la Justicia unos días después. En el caso de “El Negro Ton”, recuperó la libertad luego de prestar declaración, no así su hermano mayor, quien quedó detenido por los antecedentes que registraba.
Pena anterior
Al formular su alegato, el fiscal Vázquez solicitó una pena de un año y nueve meses de prisión efectiva para Luis Cáceres por las “amenazas calificadas”, pedido al que luego adhirió el abogado defensor.
Sin embargo, dicha sanción fue unificada con otra de un año y medio de cárcel que le habían aplicado a “Teté” el 10 de octubre de 2010 por el delito de “hurto”, por lo que la sentencia final fue de dos años de prisión, con declaración de reincidencia y costas.
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