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En primer plano, el abogado Mario Bongianino, y a la par, su colega Guillermo Bustamante. Detrás de ellos, los cuatro detenidos, dos de los cuales fueron absueltos y recuperaron la libertad luego de permanecer 11 meses entre rejas |
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Dos vecinos de la ciudad de Hernando fueron condenados ayer en la Cámara del Crimen villamariense, luego que se hicieran cargo de un robo de lechones en campos de Pampayasta Sud, y exculparan a otros tres imputados en la causa, dos de los cuales se encontraban detenidos desde mediados de junio de 2011.
Cesar Darío Vallejos y Anselmo Sosa reconocieron su culpabilidad en el hecho y recibieron penas de tres años de prisión, aunque en el caso del segundo la sanción fue de cuatro años de cárcel porque estaba debiendo parte de una condena que tenía pendiente.
En su confesión, los convictos “despegaron” del atraco a los coimputados Enrique Sebastián Lucero y Mauricio Alejandro Fonsfría, como así también a Carina Maldonado, la única que compareció en libertad.
Esta circunstancia derivó en la absolución de los tres, pero en el caso particular de Lucero y Fonsfría significó la recuperación de la libertad, que obtuvieron luego de 11 meses “a la sombra”.
Los cuatro hombres llegaron a juicio oral y público acusados como presuntos coautores de “abigeato calificado”, un delito que, legislado por el artículo 167 quater del Código Penal de la Nación es castigado con prisión de cuatro a 10 años y, por ende, no es excarcelable.
Pena más leve
Sin embargo, durante la audiencia de debate se determinó que el proceder de los condenados se encuadraba en la figura del “abigeato simple”, ilícito que tiene una pena de dos a seis años de cárcel.
En tanto, Maldonado fue procesada como supuesta “partícipe necesaria de abigeato calificado”, acusada de haber aportado los datos para que los otros sujetos fueran a robar, aunque finalmente se comprobó que no había cumplido ese rol, por lo que fue absuelta de culpa y cargo.
Al momento del hecho, la mujer, de 35 años de edad y oriunda de Pampayasta Sud, estaba domiciliada en un campo cercano a los establecimientos rurales donde se produjeron los robos, y como por entonces mantenía una relación sentimental con Fonsfría, se sospechaba que había “preparado el terreno” para que su pareja y sus amigos fueran a delinquir.
Esta hipótesis quedó descartada cuando Vallejos y Sosa asumieron su responsabilidad de los robos y exculparon tanto a Lucero como Fonsfría (que sí iban en el vehículo en el que concurrieron a los campos para consumar el hecho), del mismo modo que a Maldonado.
Hace 11 meses
Al caer la noche del domingo 12 de junio del año pasado, los cuatro hombres arribaron en un automóvil Renault 4 a los campos de Juan Agustín Mondino y Antonio Víctor Agüero, ubicados en las afueras de Pampayasta Sud, y sustrajeron 10 lechones (cinco en cada predio rural), de entre 10 y 12 kilos cada uno.
Durante la audiencia de la víspera Vallejos y Sosa declararon que sólo ellos se bajaron del rodado que conducía el primero, y que cuando le pidieron a Fonsfría que los ayudara, éste se negó. Asimismo, señalaron que Lucero no intervino en la sustracción de los lechones.
En momentos que se encontraban embolsando los animales, los ladrones fueron descubiertos por el dueño de uno de los campos (Mondino), ante lo cual optaron por darse a la fuga y sólo pudieron cargar en la “Renoleta” dos de los 10 lechones.
Pocos minutos después, los cuatro sujetos fueron interceptados por la Policía en ruta 10, cerca de Hernando, y quedaron detenidos “en flagrancia”.
Jueza y partes
El juicio fue presidido por la camarista Silvia Saslavsky de Camandone y contó con la participación del fiscal Francisco Márquez y de los abogados hernandenses Mario Bongianino (defensor de Vallejos, Fonsfría y Lucero) y Guillermo Bustamante (representante legal de Sosa), mientras que la secretaria actuante fue Gabriela Sanz.
Como Vallejos lleva 11 meses detenido, ya está en condiciones legales de obtener la “libertad condicional”. Por ese motivo, su abogado defensor realizó ayer mismo el trámite administrativo de rigor, por lo que se estima que entre hoy y el lunes dejará la cárcel de barrio Belgrano.
Con respecto a Sosa, debe señalarse que a comienzos de 2011 había recibido una condena de dos años y ocho meses de prisión en la Cámara del Crimen de Río Tercero por un hecho de “tentativa de abigeato” perpetrado en la zona rural de Hernando, y como estaba adeudando parte de aquella sanción, en la víspera se unificaron las dos sentencias y se le impuso una única sanción de cuatro años.
Finalmente, cabe señalar que Vallejos, de 28 años de edad; Sosa, de 46, y Fonsfría, de 40, son oriundos de Hernando, mientras que Lucero, de 28 años, está domiciliado en Las Perdices.
Qué dice la ley
El artículo 167 ter establece que “será reprimido con prisión de dos a seis años el que se apoderare ilegítimamente de una o más cabezas de ganado mayor o menor, total o parcialmente ajeno, que se encontrare en establecimientos rurales o, en ocasión de su transporte, desde el momento de su carga hasta el de su destino o entrega, incluyendo las escalas que se realicen durante el trayecto”.
En tanto, el segundo párrafo de la misma norma legal precisa que “la pena será de tres a ocho años de prisión si el abigeato fuere de cinco o más cabezas de ganado mayor o menor y se utilizare un medio motorizado para su transporte.”
Por su parte, el artículo 167 quater califica el hecho y puntualiza que “se aplicará reclusión o prisión de cuatro a 10 años cuando en el abigeato (…) participaren tres o más personas”.
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