Un trabajador de la Municipalidad de Villa Nueva fue condenado ayer a dos años de prisión de ejecución condicional por diferentes hechos de violencia familiar que tuvieron como víctima a su ex esposa.
Se trata de Mario Alberto Oliva, alias “Tito”, de 23 años de edad, quien reconoció haber cometido los ilícitos por los cuales fue procesado, en el marco de un juicio Correccional de trámite abreviado que se sustanció en la Cámara del Crimen de Villa María.
Oliva fue declarado autor penalmente responsable de los delitos de “amenazas”, “daño”, “violación de domicilio” y “desobediencia a la autoridad reiterada”, a raíz de una serie de violentos episodios perpetrados durante 2009 en la vivienda ocupada por su ex mujer, Jorgelina Candelaria Sánchez.
La carencia de antecedentes y la confesión lisa y llana de los hechos le permitieron a Oliva acceder a una pena en suspenso, aunque igualmente deberá someterse a un tratamiento psicológico y tendrá que cumplir diferentes normas de conducta si pretende conservar el estado de libertad.
El proceso oral y público fue presidido por la camarista Silvia Saslavsky de Camandone y contó con la participación del fiscal en lo Correccional, Horacio Vázquez, y de la abogada defensora Verónica Arregui, mientras que la secretaria actuante fue Marcela Mattalía.
Los incidentes se registraron luego que la Justicia resolviera la exclusión del hogar de Oliva. En ese marco, el ahora condenado trabajador municipal villanovense irrumpió por la fuerza en la vivienda ocupada por su ex esposa, donde rompió una ventana y hasta le prendió fuego a una frazada, además de proferir amenazas contra la joven mujer.
En otra oportunidad, el irascible sujeto violó una disposición judicial que le impedía acercarse al domicilio familiar.
Oliva, nacido en Villa María el 2 de agosto de 1988, deberá cumplir una serie de reglas de conducta fijadas por la Justicia, entre las que sobresale el tratamiento psicológico al que deberá someterse a la brevedad.