Escribe: Fernando de Goycoechea

En cancha del “Verde” villamariense, Tala tuvo que agotar hasta su último esfuerzo para llevarse la victoria por 28 a 23 ante Jockey Club.
Tal como se vislumbraba en la previa el choque entre los “hípicos” y los de Villa Warcalde, además de prónostico reservado, prometía mucha lucha y definición incierta.
En la primera parte del juego Jockey respondió de mejor forma, manejó los tiempos y el tanteador del partido.
Nicolás Ferreyra y sus intervenciones (en lo táctico-estratégico y en efectividad a los postes) fueron fundamentales para consolidar los mejores momentos del dueños de casa.
En el segundo capítulo, Tala cambió radicalmente de actitud y pudo desenvolver a pleno su libreto.
Yendo de punta con los delanteros, desplegando el juego con los backs y adueñándose del scrum, los cordobeses no sólo pudieron dar vuelta el marcador sino que también lograron atesorar finalmente un triunfo más que difícil.

Arrebato verde

En la primera parte del partido, Jockey Club llevó adelante un plan que le brindó muchos réditos.
Con Ferreyra como líder, la escuadra anfitriona eligió el juego aéreo para golpear las últimas líneas de su rival.
Manteniéndolos en su terreno y forzándolos por tierra (en los fijos y los móviles) a cometer todo tipo de errores, los “Verdes” redondearon un negocio que el apertura de los locales con cinco penales y un drop terminó de expresar en el tanteador.
Por el lado de la visita, a pesar de tener muchos inconvenientes para echar a andar su propuesta, pudo facturar a través de dos penales de Stefano Ambrosio y un drop de Mariano García.

Tala respira

En la segunda etapa, la realidad del cotejo cambió de manera radical.
Echando mano a su banco de suplentes (cambiaron íntegra la primera línea), el equipo que dirige técnicamente a Tala inyectó a los “blanquinegros” la dosis justa de energía para torcer el destino del juego
Apostando al juego corto y profundo con los delanteros y luego el despliegue de los backs, Tala se adueño del protagonismo.
Otro detalle significativo fue el férreo control en scrums y lines. Asegurándose la obtención y complicando el trabajo del contrario, el equipo invitado impuso condiciones.
El cambio de manos en el dominio tuvo su correlato en la pizarra. Allí y con tres penales de Ambrosio (8, 15 y 21 minutos) más el try de Quaranta a los 24 minutos, los de Córdoba se pusieron al frente y pintaron un panorama diferente al duelo.
Sin embargo y a pesar del crecimiento desmedido de su oponente, Jockey tuvo la lucidez para golpear el ingoal enemigo.
Matías Brondello con un excepcional recupero y posterior corrida marcó un try esperanzador (falló Ferreyra la conversión y quedaron dos puntos abajo) para los de barrio Roque Sáenz Peña.
De todos modos, a los 37 minutos, Ambrosio volvería a estirar diferencias tras una infracción local en un scrum.
La última fracción del tiempo reglamentario se jugó en la zona de extrema defensa de Tala. Jockey tuvo oportunidades de empatar (kick cruzado de Ferreyra y scrum en las cinco) pero no pudo concretar y se quedó con las manos vacías ante un rival que a fuerza de su reacción pudo llevarse cuatro puntos muy importantes.