Un albañil oriundo de la ciudad de Córdoba fue condenado ayer por un asalto a mano armada cometido hace poco más de dos años en la ciudad de Oliva, al cabo de un juicio de trámite abreviado en el que el imputado confesó su responsabilidad en el hecho.
Se trata de Ernesto Adrián Ruiz, quien recibió una pena de tres años y tres meses de prisión efectiva, con declaración de reincidencia, aunque dicha sanción se unificó con otra de siete años y medio impuesta por la Justicia de la capital provincial, también por delitos contra la propiedad.
En definitiva, el convicto cordobés fue declarado autor responsable de “robo doblemente calificado”, por uso de arma de fuego y empleo de llave o ganzúa, y se le aplicó una única sanción de 10 años de cárcel, de los cuales ya lleva cumplidos seis años y nueve meses.
Ruiz, de 28 años de edad, está detenido desde el 10 de setiembre de 2010, algo más de seis meses después del asalto que damnificó a Paulo César Temporini y su familia, quienes fueron sorprendidos a la madrugada cuando descansaban en su vivienda.
Cabe señalar que Paulo Temporini es un conocido vecino olivense, quien al momento del asalto se desempeñaba como ayudante de campo del entrenador Cosme Zaccanti, en el Club Atlético Vélez Sarsfield de aquella ciudad, que en julio de 2010 se consagró campeón de la Liga Independiente de Fútbol.
El hecho se produjo alrededor de la 1.30 del martes 2 de marzo de aquel año, cuando dos delincuentes armados y a cara descubierta ingresaron al domicilio sito en Monseñor Gallardo 633 de Oliva, en momentos que la familia Temporini estaba durmiendo.

Los maniataron

Aprovechando esa situación y bajo amenazas de muerte, los ladrones redujeron a los ocupantes de la finca (entre ellos, dos menores), los maniataron con precintos y los encerraron en el dormitorio matrimonial, tras lo cual revolvieron toda la casa y se apoderaron de 600 pesos en efectivo, tres anillos de oro, dos teléfonos celulares, una cámara fotográfica digital y un reloj pulsera.
Los delincuentes no forzaron ninguna abertura, por lo que ingresaron por la puerta del frente utilizando una llave similar o una ganzúa, circunstancia que -del mismo modo que la utilización de armas- también agravó el asalto.
La investigación policial dio sus frutos seis meses después del asalto, cuando se logró la detención de Ruiz, no así de su cómplice, quien hasta el momento no pudo ser individualizado.
Tras la aprehensión del sospechoso, la Fiscalía de Oliva, a cargo de la instrucción de la causa, determinó que Ruiz tenía una condena de siete años y medio de prisión, impuesta por la Cámara del Crimen de 11ra. Nominación de Córdoba por dos robos a mano armada cometidos precisamente en la capital provincial.
El trabajador de la construcción pasó cinco años en la cárcel y recuperó la libertad, de manera “condicional”, en los últimos meses de 2009.
Por esa razón se lo declaró reincidente y se unificaron la pena dictada por la Justicia cordobesa con la aplicada en la víspera por la Cámara del Crimen de Villa María.
De este modo, Ruiz sólo podrá solicitar el beneficio excarcelatorio conocido como “libertad asistida”, que permite el egreso seis meses antes del cumplimiento total de la condena, en este caso cuando complete nueve años y medio entre rejas.
De prosperar el pedido (en su momento el juez de Ejecución Penal de esta ciudad, Arturo Ferreyra, evaluará la situación), el reincidente convicto podría dejar la cárcel a mediados de marzo de 2015, ya que todavía le faltan por purgar dos años y nueve meses.
El juicio oral y público fue presidido por el camarista René Gandarillas y contó con la participación del fiscal Francisco Márquez y de la defensora oficial Silvina Muñoz, mientras que el secretario actuante fue Roberto Jue.
Ernesto Ruiz nació en la ciudad de Córdoba el 29 de febrero de 1984 y registra último domicilio en barrio Hipólito Yrigoyen de la capital provincial. Es soltero y, según declaró ayer en la sala, al momento de ser detenido trabajaba como albañil.