La secretaria de Desarrollo Humano de la Municipalidad de Villa María, Verónica Vivó, aseveró que Rubén Rüedi redactó los fundamentos del proyecto de ordenanza que derivó en la venta de la Plaza Manuel Ocampo. Fue a través de un comunicado que se enmarca en la polémica abierta por la oposición que despertó la entrega de la cancha de calle San Juan en un sector político.
“Qué ironías de la vida, ver por un medio local a un supuesto compañero historiador al lado de un antiprogreso, antiobras, mejor diría anti-Villa María desde hace varios años; hoy se puede decir que entre él y Lilita Carrió hay mucha similitud: se basan en denuncias públicas para tapar su incapacidad de mostrar acciones concretas en favor de la ciudad desde cada uno de los espacios que le tocó ocupar”. Así empezó la carta enviada a EL DIARIO.
“Decía, la ironía de escuchar decir que la Plaza Ocampo tiene un valor histórico cuando fue el mismo historiador, en el mes de diciembre pasado y siendo parte del equipo de gobierno de Accastello, quien me redactó los argumentos de la fundamentación del proyecto de ordenanza para aprobar la construcción del estadio. Juntos, en la máquina del bloque de concejales, transmitiendo la tranquilidad y la certeza de que no se le podía atribuir a ese espacio ningún tipo de valor histórico y sí se le podía atribuir un valor sentimental de quienes cuando niños hicieron sus prácticas deportivas en ese espacio. Y que, en todo caso, era posible pensar en redactar la historia colectiva de ese lugar para que quedara plasmada para la posteridad, pero que no se podía detener el progreso de una ciudad por un espacio que jamás funcionó ni fue plaza, sólo en su nombre Plaza de Ejercicios Físicos Manuel Anselmo Ocampo”, reveló la ex concejala.

@ Sachetto, al cruce

En tanto, luego de que Rubén Rüedi le contestara a Rafael Sachetto, presidente del bloque de concejales del oficialismo, en la edición de ayer, llegó la contra respuesta del edil, que tituló “Quizás la única ciudad con furia, es la de su propio interior personal”, aludiendo a una manifestación del historiador.
“Es evidente que el historiador ha leído otra nota que no es la mía o siendo la mía la ha leído tan mal que no entendió. Paso a explicar por qué digo esto, a través de la estructura que conforma mi nota del día lunes:
En primer lugar, es una reflexión sobre lo que considero es un espacio público (nada se dice de Rüedi).
En segundo lugar, refiero a un elemento objetivo, cual es la nota remitida el 17 de noviembre pasado (nota enviada por el propio Rüedi y tampoco digo nada que lo descalifique).
En tercer lugar, refiero a los planos de 1867 y 1883 (evidentemente Rüedi no hizo estos planos como para que se sienta ofendido).
En cuarto lugar, doy cuenta con mayor profundidad sobre los alcances de la ley que crea la Comisión Nacional de Museos y de Monumentos y Lugares Históricos (tampoco hablo de Rüedi).
En quinto lugar, expongo el lugar desde donde Rüedi habla (entiendo que esto le moleste porque patentiza su posicionamiento).
Y por último, realizo una reflexión sobre la historia de la ciudad y sus grandes logros (que Rüedi puede o no estar de acuerdo, sólo es una reflexión).
En ningún momento me he referido a su persona en términos agraviantes, creo que ha leído otra nota. Simplemente no estoy de acuerdo con él.
El único odio que se trasluce está en su respuesta a mi reflexión.
Por último, advertir lo siguiente:
Los gatos, aunque estén encerrados, no pueden ladrar. Son gatos.
Quizás el historiador no conoce los proyectos de desconcentración urbanística que este Gobierno local tiene (como la ciudad judicial y administrativa o las áreas comerciales distantes, la pileta comunitaria, por citar sólo tres).
El dinero que vino de la Nación a esta ciudad se utilizó para obras de agua, cloacas, pavimento, cordón cuneta o las mismísimas 400 Viviendas que es el lugar donde muchos villamarienses viven, incluido el historiador. La infraestructura básica es prioritaria a la deportiva.
Es bueno saber que el señor Rüedi crea conocer el pensamiento y opinión de la presidenta sobre nuestro intendente. Ya no tendremos que viajar a Buenos Aires para preguntarle a ella”, concluyó.